Salvo en su logo, no parece haber demasiadas sonrisas en Amazon estos días. No al menos en MAD4, alias del centro logístico de San Fernando de Henares y más grande de España. Las posiciones siguen enrocadas donde quedaron durante las movilizaciones del pasado Prime Day, y los trabajadores continúan adelante con su huelga durante el Black Friday y días claves durante la campaña de comercial más intensa del año: la navideña.

Los trabajadores no dan su brazo a torcer a la empresa, que avanzó con un convenio laboral de forma unilateral tras unas negociaciones nada fructíferas, y esta continúa con una campaña de derribo a estas. Al menos así lo relatan las declaraciones de algunos de sus empleados, recogidas por El Confidencial.

Altercados y posiciones irreconciliables: así culmina la segunda huelga de Amazon

Bypass vía El Prat

Estos testimonios, recogidos todos ellos bajo pseudónimos ficticios para evitar represalias, relatan la presión que ejercen desde los eslabones más altos para reducir el seguimiento de los paros y mermar las repercusiones sobre los pedidos de estos días. En este sentido, la práctica más efectista por parte de Amazon es la de desviar la mercancía a través del centro logístico del Prat. Con otro convenio sobre la mesa, sus trabajadores no paran. Durante el Prime Day, este bypass de mercancía ya fue ejecutado:

"Trabajo en el departamento que se encarga de empaquetar todo y dejarlo listo para los envíos. Y llevo varias semanas preparando paquetes para BCN1, que es el código del centro de Barcelona. Están volviendo a desviar la mercancía, como ya hicieron en la huelga del Prime Day."

Pero no sería la única práctica para contener las jornadas de huelga que se vienen durante las próximas semanas. No es la primera vez que se denuncian "amenazas veladas" sobre los trabajadores, de quienes peligra su puesto de trabajo y su cargo. Los trabajadores temporales, con buena parte de la carga, temen por su renovación mientras que los fijos ven peligrar su posición ante el soporte a las protestas.

Portazo de Amazon ante las protestas de sus trabajadores

El nuevo convenio colectivo de la empresa, efectivo desde el pasado mes de abril, empeoró las condiciones para los mozos de almacén del gigante que dirige Jeff Bezos. Modificando las condiciones de la baja por enfermedad, reduciendo el salario de las horas extra, aplicando jornadas de 9 horas en "picos de trabajo" o ajustando las posibilidades de promoción en la empresa.

La huelga será en los días de más carga de este Black Friday, el viernes 26 y sábado 27. Se suman otras cuatro jornadas durante el puente de la Constitución –del 6 al 8 de diciembre–, los días 25 y 30 de diciembre y el 3 de enero. Convocados por CCOO y CGT, los sindicatos mayoritarios, los paros suponen un total de 12 días en 2018 que, con respaldo escalonado, suponen unos tres días por trabajador.

Desde el CSIT –tercero de los cuatro sindicatos presentes en Amazon, siendo el último UGT– afirman que apoyarán todos los paros convocados, pero que es también por la más lenta vía judicial es "tan efectiva como las huelgas" y que se trata de una "carrera de fondo" que puede durar "fácil dos o tres años".

Mientras tanto, Amazon afirma mantener un diálogo "abierto y directo" con sus más de 2.000 empleados en España y anima "a cualquiera" a que se acerque a sus centros de logística a verlo con sus propios ojos.