Los científicos del Laboratorio de Investigación de Inteligencia Artificial de Facebook (FAIR, por sus siglas en inglés) están trabajando junto con el Departamento de Radiología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Nueva York (NYU) para hacer hasta 10 veces más rápido el proceso de tomar una imagen por resonancia magnética (IRM).
Normalmente, capturar una IRM puede tardar de 15 minutos hasta una hora, tiempo en el cual el paciente debe de permanecer completamente quieto. Eso no es fácil para cualquiera, y menos si se trata de un menor o una persona que está padeciendo alguna clase de dolor.
El objetivo del proyecto de investigación conjunto llamado "fastMRI", anunciado este lunes a través de un post en el blog de Facebook, es aplicar herramientas de imágenes basadas en inteligencia artificial (IA) para que la duración se reduzca hasta en un 90%. De acuerdo con el doctor Dan Sodickson, especialista en imágenes de NYU, de tener éxito, la toma de una IRM podría reducirse de 50 a 5 minutos.
De acuerdo con el especialista, la técnica de reconstrucción de imágenes es equiparable con la forma en que el cerebro de una persona puede distinguir con éxito objetos en la oscuridad. Aunque no se tenga una vista completa de lo que estamos mirando, explica, sabemos cuál es la estructura subyacente de ese objeto. De esta manera, podemos completar de manera muy rápida y precisa la información faltante.
"Usando IA, creemos que puede ser posible capturar menos datos y, por lo tanto, obtener imágenes más rápido, mientras se preserva o incluso mejora el contenido de información enriquecido de las imágenes de MR", dijo Sodickson, según recoge *Forbes*, y añadió:
> La clave es entrenar a las redes neuronales artificiales para reconocer la estructura subyacente de las imágenes, y qué tipos de cosas tienden a agruparse, de modo que las redes puedan completar las vistas que se emiten desde el escaneo acelerado.
Para ayudar a entrenar a los algoritmos, NYU ha proporcionado a Facebook aproximadamente 3 millones de imágenes de resonancia magnética de la rodilla, el cerebro y el hígado. A todas las imágenes y los datos del escáner en bruto se les han quitando los nombres de los pacientes y toda la demás información de salud protegida, aseguraron los responsables del proyecto.
No está claro en cuánto tiempo este proyecto de investigación podría implementarse en los hospitales. No obstante, eventualmente podría reemplazar a las máquinas de rayos X y la tomografía computada (CT) en algunos casos, lo que permitiría a los pacientes evitar la radiación.