Si eres del tipo de personas que el número de seguidores le importa bastante y usas Twitter tenemos malas noticias: mañana verás la cifra disminuir, y en algunos casos, puede que sea un descenso significativo.
El motivo es que Twitter ha anunciado que las cuentas congeladas no contarán en el número de seguidores que aparece en el perfil de los usuarios con el objetivo de hacerlo más real, como parte del mismo ejercicio de transparencia que está llevando a cabo para luchar en contra de bots y trolls en la plataforma, muchos de los cuales son usados para hacer spam, difundir noticias falsas o malware.
Tenemos un compromiso claro por generar confianza y promover una conversación saludable en Twitter.
— Twitter España (@TwitterEspana) July 11, 2018
Las cifras de seguidores deben de ser relevantes y precisas. Por eso ahora excluimos las cuentas congeladas en el recuento de seguidores. https://t.co/qPca1EJGXh
Para Twitter una cuenta congelada es aquella en la que se ha detectado actividad sospechosa o ha sido suspendida por "cambios significativos en comportamiento". Cuando esto ocurre, la red social pone la cuenta en pausa y contacta a su dueño para que verifique su identidad y restablezca su contraseña. Es una medida de seguridad que ayuda a comprobar que hay una persona real detrás o que no está siendo usada por un tercero.
Aquellos cuentas en las que su dueño no volvió nunca a restablecer serán las que Twitter deje de considerar en el número público de seguidores. La compañía asegura que el impacto será mínimo para la mayoría de usuarios, no más de cuatro seguidores menos, pero aquellos con altas cifras de seguidores podrían ver una caída mucho mayor.
Los que compran seguidores serán quienes más verán caer la cifra
Hay un tipo de usuario que se verá particularmente afectado con la medida: aquellos que compran seguidores para intentar aparentar más relevancia e influencia de la que realmente tienen. Cuentas usadas para este propósito serán eliminadas del número público de seguidores, como parte del proceso de limpieza para mejorar la imagen de la red social.
La facilidad de compra de seguidores, que en su gran mayoría son cuentas fantasma que twittean poco o contenido automatizado, ha devaluado el significado y el valor de tener un número alto de seguidores y ha lastimado la reputación de la red social.