Una cosa es decir que todo está escrito y que desde la Grecia antigua no se ha inventado nada nuevo y otra muy distinta es copiar directamente el trabajo ajeno sin citar la fuente y/o atribuyéndose el mérito.
Antiguamente copiábamos el contenido de las enciclopedias multimedia como Microsoft Encarta. Algunos ni se molestaban en eliminar la marca de Copyright que acompañaba a cualquier contenido exportado.
En la actualidad los estudiantes copian contenido de Wikipedia literalmente y todo apunta a que sea la tónica habitual para quienes no les gusta escribir.
Pero no es lo mismo copiar una frase o párrafo a modo de cita que copiar fragmentos enteros, ya que aquí caemos en los plagios, ya existentes en la época del papel y muy habitual en la era de internet.
Pero siempre hay una o más soluciones a un problema, y en el caso de los plagios, contamos con analizadores de textos que bien pueden decirnos si los dos documentos comparados son idénticos o simplemente tienen similitudes.
Microsoft Word, por ejemplo, ofrece esta opción desde su versión 2007 en adelante. Desde Revisar > Comparar podremos comparar dos versiones de un documento, o mejor dicho, dos documentos diferentes.
Veamos más detectores de plagios en versión online para emplear directamente desde tu navegador webp simplemente pegando textos o importando el contenido de los documentos.
Plagiarisma
Compatible con decenas de idiomas (más de 190), Plagiarisma es un servicio que nos permite encontrar plagios a través de Google o Bing.
Para ello nos permite pegar el texto en un campo en blanco, aportar la URL donde está colgado el documento original, seleccionarlo de Google Drive o subir un archivo en formato TXT, HTML, RTF, DOC, DOCX, PPTX, XLSX, XLS, PDF, ODT, EPUB o FB2.
Además de estar disponible en formato online, podemos descargar su aplicación oficial para Android o instalar un plugin para la plataforma educativa Moodle.
Plag.es
Gratuito, profesional y disponible en varios idiomas. Plag.es requiere registro para u uso.
A cambio obtendremos un buen detector de plagios que además hace las veces de corrector, pues avisa de coincidencias dentro del mismo documento, frases mal citadas, etc. Otra ventaja es que detecta plagios en diferentes idiomas.
Sólo tendremos que subir el documento en cuestión y Plag.es lo comparará con diferentes fuentes, que incluyen páginas web, libros, artículos, etc.
PlagScan
Otro buen detector de plagios es PlagScan, disponible en varias versiones. La gratuita admite hasta 2.000 palabras por búsqueda.
Tras facilitar el documento original, PlagScan realiza una búsqueda en distintas fuentes y nos devuelve un PDF donde indica los fragmentos copiados o plagiados junto con enlaces a dónde se ha encontrado ese plagio.
Una ventaja de PlagScan es que permite elegir entre cuatro tipos de informes según lo que andamos buscando. Por otro lado, diferencia meras citas de plagios.
Unicheck Plagiarism Checker
En forma de herramienta online y como añadido para Google Docs, Unicheck Plagiarism Checker encuentra plagios analizando el texto y comparando con distintas fuentes, como Wikipedia y otras fuentes de consulta.
Además de diferenciar entre menciones, citas y plagios, busca en más de 3.000 lugares diferentes en tiempo real. A esto hay que añadir su compatibilidad con documentos en distintos formatos, como DOC, PDF, PAGES, TXT, RTF y HTML.
La versión gratuita de Unicheck permite analizar hasta 200 palabras en formato online y hasta 5 páginas en su add-on para Google Docs.
Dupli Checker
Hasta 1.000 palabras por búsqueda permite analizar Dupli Checker en busca de plagios, bien copiando el texto directamente o subiendo un documento de texto.
Disponible online y también como app para iOS, Android y macOS, Dupli Checker busca plagios empleando distintas fuentes de internet. Opcionalmente permite y también analizar la gramática del mismo si pulsamos el botón correspondiente, pero exclusivamente en inglés.
Las aplicaciones de Dupli Checker permiten importar documentos PDF o DOC/DOCX desde el disco local o desde Google Drive o Dropbox.
