Después de darse a conocer esta mañana que Netflix aumenta los precios de sus suscripciones en Estados Unidos, la duda que asaltaba era evidente: ¿pasaría lo mismo en España? No hemos tenido que esperar mucho, puesto que la compañía de contenido en streaming ya ha confirmado que el precio de sus planes estándar y premium aumenta también en nuestro país.
Los nuevos precios se traducen en un aumento de 1 euro para el plan de suscripción estándar y de 2 euros para el plan premium, lo cual queda reflejado en las tarifas del siguiente modo: 10,99 € para la estándar –en lugar de los 9,99 € anteriores– y 13,99 € para el plan más selecto –respecto a los 11,99 € previos. Siguen así la estela del país estadounidense, donde la subida de precio ha venido de la mano con un aumento en el valor de las acciones en Bolsa.
Este nuevo movimiento no afecta al plan de suscripción básico, sin embargo, que se mantiene en los 7,99 euros para dar salida a los usuarios menos exigentes. Recordamos que esta versión de entrada no cuenta con la posibilidad de ver contenido en HD (ni UHD, por descontado) y este solo puede visualizarse en un dispositivo al mismo tiempo. El estándar suma otra pantalla para visualizar de manera simultánea y añade la opción de HD y, por último, el premium ofrece hasta 4 pantallas a la vez y también opción UHD.
Sin miedo a la competencia
En un momento en el que la competencia en lo que a servicios de contenido en streaming se refiere está comenzando a dejarse notar en el territorio español –principalmente con HBO y Netflix, pero también con otros servicios como Movistar Series o el reciente Sky–, una subida de precio puede parecer una acción un tanto temeraria. Y lo sería, de no ser porque se trata de Netflix y no cualquiera de los demás.
La posición de Netflix en España, en general, resulta envidiable frente a sus competidores. Ahora todo el mundo conoce qué es Netflix gracias a sus constantes anuncios, sus –a veces controvertidas, pero efectivas– campañas de marketing y un catálogo que se esfuerzan por aumentar con series propias y, más importante aún, series de producción española que también se hacen notar. Frente a esto, un rival principal que es HBO cuya principal baza ha sido durante demasiado tiempo únicamente Juego de Tronos.
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Cierto es que HBO también piensa ya en comenzar a producir en España de manera focalizada, pero parece distante todavía el momento en el que se pueda medir con Netflix en igualdad de condiciones. Queda por ver ahora la respuesta de los usuarios ante esta subida de precio que, al ser leve, no es probable que provoque una respuesta negativa.