Eres el gran magnate de Hollywood esperando su cita de las 12:30 antes del almuerzo ejecutivo. «Cuéntame tu película en siete palabras o de lo contrario sal de mi oficina» dices con voz serena a la promesa sudorosa que cierra la puerta temblorosamente.
La respuesta hace que canceles tu menú al estar completamente satisfecho «Princesa de Disney en el mundo real».
Inmediatamente te imaginas la escena: chica de talla grande en vestido camina por las calles de Nueva York y termina muerta de una sobredosis con un gran acto musical que reflexione sobre los vicios de nuestra sociedad.
Claramente tu trabajo no va más allá de aprobar algunos proyectos para tu jefe y terminas llorando con el resultado unos cuantos años después rodeado de niñas de 12 años.
Una enorme oportunidad fue desperdiciada más allá del disfrute de ver a grandes actores haciendo papeles ridículos que por una razón u otra todavía persisten en mi cabeza —junto a una extraña canción que todavía susurro mientras limpio el baño—. Sin embargo no todo está perdido, ya que al parecer existe otra persona en el planeta que siempre tuvo una visión de princesas de Disney en situaciones oscuras.
Por esos rincones tenebrosos donde se juntan los drogadictos o aquellas habitaciones aisladas cubiertas de tráfico humano es muy probable que encontremos una princesa perdida, y eso es exactamente lo que el fotógrafo Shannon Dermody explora en su última sesión fotográfica.
Queriendo destacar los grandes problemas que afronta nuestra sociedad las fotografías logran catapultar una etiqueta de advertencia en el contenido que verán a continuación.
Una propuesta de «sexo, drogas, alcohol y princesas de Disney» que cumple perfectamente los estándares de las siete palabras y ese contenido que roza con estilo la inocencia perdida que habita en los problemas reales que ninguna película de Disney tendría el valor de mostrar.
Violencia doméstica
Contaminación
Alcoholismo
Violación
Suicidio
Tráfico sexual
Tabaco
Heroína
Brutalidad policial
