Las primeras unidades del Galaxy S8 presentan problemas en su pantalla. Los primeros compradores, en Corea del Sur, han publicado en redes sociales varias imágenes y vídeos que muestran un tono rojizo excesivo en las pantallas de sus teléfonos.
El fabricante, mediante un comunicado oficial, asegura que los tonos rojizos no son un fallo de producción, e invita a los usuarios a corregir el tono de la pantalla desde la sección de ajustes, donde Samsung habilitó una opción que permite ajustar el color de la pantalla. Samsung también invita a aquellos usuarios descontentos a cambiar su unidad en los puntos de venta o en el servicio técnico.
No obstante, con estos ajustes en modo neutro, las diferentes unidades del Galaxy S8 muestran notables diferencias entre sí. En un vídeo publicado por Erica Griffin el día del lanzamiento es posible apreciar fácilmente cómo dos unidades diferentes de Galaxy S8, con los mismos ajustes de color, muestran tonos muy diferentes en su pantalla.
Samsung no ha especificado la razón por la que las pantallas de sus dispositivos no ofrecen unas prestaciones similares. Entre las más plausibles se encuentran: errores en la fabricación de determinadas unidades y diferentes tandas de producción. El porcentaje de unidades afectadas es aún desconocido, al igual que el posible impacto en las ventas de este nuevo teléfono.
El Galaxy S8 tampoco llegará con Bixby en pleno funcionamiento, tal y como Samsung desveló la pasada semana. Ambos incidentes dificultan el camino del Galaxy S8, uno de los teléfonos más importantes para la división de telefonía de Samsung, que busca una rápida recuperación tras lo ocurrido con el Galaxy Note 7.