grupo PSA

Opel es un competidor natural del Renault y Citroën en muchos segmentos, pero puede haber un motivo más que interesante que justifique la compra: convertir a Opel en el fabricante de coches eléctricos del grupo francés, un movimiento con vistas al futuro que buscaría consolidar al nuevo grupo resultante en uno de los más importantes para el presente y futuro. Y es que hace tan solo unas semanas ya salía la noticia de que General Motors podría licenciar su tecnología de coches eléctricos al grupo PSA si este compra Opel.

Los tres fabricantes, Opel, Renault y Citroën, disponen de vehículos en prácticamente todos los segmentos: compactos, berlinas, familiares, SUVs, utilitarios... ¿cómo van a convivir los tres en un mercado que es perseguido por ambos? ¿Cómo diferenciarse cuando venden lo mismo al mismo tipo de cliente? Muchas voces se han alzado porque lo más convencional será cerrar concesionarios y factorías ya que puede parecer que sobran, pero puede existir otra vía: la fabricación de coches eléctricos.

grupo PSA
Toma de recarga del Opel Ampera

Opel tiene experiencia creando coches híbridos enchufables gracias a su actual propietario General Motors, y tiene en su catálogo opciones híbridas y eléctricas, un punto de partida muy interesante para poder ofrecer algo más a los clientes. En un mismo segmento, Opel podría pasar de ser competencia a llave si se transforma en un fabricante de coches 100% eléctricos, el primero de los grandes en poder decir que abandona el petróleo. Y esto podría ser un golpe en la mesa para el futuro grupo PSA-Opel porque podría tener un modelo eléctrico en cada segmento y adelantarse al futuro.

Todos los fabricantes están sacando líneas eléctricas de sus coches, BMW, Renault o Ford, pero Opel podría ser el primero en hacer el cambio. El fin de los coches térmicos está cada vez más cerca y un cambio de este calado puede ser muy complejo de dar, porque implica un cambio total en la creación de coches, desde el diseño a la tecnología pasando por la propia fabricación, con cambios importantísimos en todas sus factorías de coches y accesorios.

El grupo PSA puede ver en Opel al perfecto ejemplo de esta transformación: comprar una empresa que está muy mal desde el punto de vista financiero e inyectar dinero para hacerse con sus patentes, factorías y empleados para poder darle una vuelta completa virándola hacia la fabricación de coches eléctricos. Y de paso, convertir su grupo en el primero en contar con una marca que solo hace coches eléctricos.

grupo PSA
Batería y motor del Opel Ampera

Todo esto evitando modificar las dos compañías fuertes del grupo: Citroën y Peugeot, que seguirán, por el momento, con su línea habitual. Y, además, este movimiento podría ser fundamental para encarnizar su lucha con Renault en Francia porque el grupo PSA no tiene un modelo eléctrico que pueda luchar contra el ZOE.

Solo hay dos preguntas que responder:

¿Se puede convertir un fabricante de coches 'normales' en uno solo de coches eléctricos? En caso de ser posible, ¿quiere el grupo PSA hacerlo?

Por el momento el grupo francés, tras confirmar la compra por 2.200 millones de euros, tiene que comunicar el plan que seguirá con Opel, pero el camino de convertirla en una empresa de coches eléctricos podría suponer su transformación en el Tesla europeo, un apellido con el que sueñan muchos fabricantes.

Recibe cada mañana nuestra newsletter. Una guía para entender lo que importa en relación con la tecnología, la ciencia y la cultura digital.

Procesando...
¡Listo! Ya estás suscrito

También en Hipertextual: