Aunque las conexiones actuales ya parezcan más que suficientes para los usos que hoy en día se hacen de Internet, lo cierto es que las necesidades y los archivos transferidos siempre son crecientes. Si algo hay seguro en la historia de la informática es que, frente a lo que se pensaba de los discos duros de gran capacidad, siempre se acaban llenando. Con las velocidades de descarga ocurre igual. No es lo mismo el Internet de 2005 que el de 2016, donde todos los vídeos y plataformas de streaming se ofrecen en Alta Definición. AirGig quiere ser protagonista del siguiente paso en el tendido eléctrico.
El operador estadounidense AT&T ha mostrado un sistema en estado de desarrollo que queire conseguir velocidades similares a las de la fibra eliminando todo el coste que conlleva instalarla. Para ello, con AirGig se plantea transferir la red a través del tendido eléctrico, solución que recuerda a los adaptadores PLC domésticos, que aprovechan la red eléctrica de un hogar para la transmisión de datos entre varios equipos.
Además de ser más barato que instalar fibra, con AirGig se alcanzaría cualquier municipio que cuente con electricidad conectada a la red nacional, frente a una fibra que se instala siempre tomando primero muestras de rentabilidad, por lo que zonas rurales quedan totalmente desamparadas durante años. De hecho, en España, muchas de esas zonas siguen con conexiones pobres de menos de 10 mbps.
Para llevar a cabo AirGig, AT&T propone antenas de plástico fijadas en los postes eléctricos, donde se generarían y enviarían señales de banda ancha mediante campos magnéticos. AirGig será probado por la compañía en 2017. En esa fecha es probable que comiencen a aparecer problemas más graves de los que ahora se plantean, pero a priori el proyecto apunta maneras.