En los últimos meses, el dólar ha oscilado peligrosamente hasta los veinte pesos mexicanos. Es un duro golpe, ya que en 2014 cerró su valor en 14 pesos. Las causas (la fuga de capitales, la caída del barril de petróleo) son tan importantes como las consecuencias que tendrán en la economía de los mexicanos.

A nivel macro, encontramos sus consecuencias en la inflación, el aumento de la deuda externa o el número de exportaciones. En la economía de los mexicanos, el incremento del valor del dólar sólo puede traer malas noticias. Para los ciudadanos de a pie, la consecuencia más obvia es que el peso otorga cada vez menor poder adquisitivo. No obstante, el problema más preocupante es el aumento en las tasas de interés.

¿Qué es una tasa de interés? Al pedir un préstamo al banco (ya sea un crédito hipotecario o una simple compra con tarjeta), el banco cobra una tarifa porcentual por sus servicios. Esta tarifa está basada en un porcentaje (interés) que le cobran al banco por pedir dinero al Banco de México (BM), el cual se llama "tasa de interés de referencia”.

La ganancia de los bancos está en ese margen de diferencia entre el interés referencial (que debe pagar al BM) y el que le cobra a sus clientes.

La tasa de interés referencial que emite el banco central, en este caso, el BM, es la cantidad que paga a los inversores que compran deuda a través de bonos o CETES. Este porcentaje compite con los bancos de otros países por el dinero de los inversores.

tarjetas-de-credito
frankieleon via Compfight cc

Si dejemos de lado los tipos de interés sobre la deuda soberana y nos centramos en los bancarios que impactan en la economía de los mexicanos, tampoco hay una fórmula mágica para el éxito de la economía de un país. Pero, cuanto más alto sea el interés, más difícil se hará comprar, y más caro es financiarse. No obstante, si el interés es bajo, habrá más actividad económica, mayor liquidez en el mercado y la vez mayores posibilidades para la economía de empresas y familias que pagarán menos por financiarse, fomentando la inversión.

Aunque también intervienen otros factores, como la estabilidad política o social de los países en los que los inversores han de depositar su confianza. Los inversores han movido su dinero recientemente a otras economías y el Banco de México decidió aumentar la tasa de interés referencial un .50%, por lo que ahora es de 3,75%, con el fin de atraer inversores y evitar que siga cayendo el peso mexicano.

3,75% podrá no parecer mucho, sin embargo cuando hablamos de cientos de miles de pesos o de millones, es bastante dinero. La nueva tasa de interés referencial afectará principalmente a personas que han pedido prestamos con interés variable.

La tasa de interés variable es el porcentaje que tendrá el préstamo y, como su nombre indica, puede variar a lo largo del tiempo. Las ventajas: cuotas que suelen ser más pequeñas que las tasas fijas, justo porque existe el riesgo de que todo lo expuesto anteriormente suceda.

Pero la tasa fija no estará exenta de cambios en un futuro cercano. Si creías que comprar un apartamento, un automóvil o terminar de pagar las tarjetas de crédito era difícil, ahora lo será más.

Recibe cada mañana nuestra newsletter. Una guía para entender lo que importa en relación con la tecnología, la ciencia y la cultura digital.

Procesando...
¡Listo! Ya estás suscrito

También en Hipertextual: