La realidad virtual es una de las nuevas vías de negocio para Google junto a sus apuestas en salud y tecnología de conducción autónoma.
Un equipo de ingenieros de Alphabet está desarrollando lo que sería el primer kit de realidad virtual completamente autónomo, sin depende de un smartphone u ordenador insertado o conectado a él según las fuentes cercanas al caso para el Wall Street Journal.
En su apuesta, también encontraremos un kit destinado al público general no entusiasta. Una versión mejorada y más avanzada que su popular Google Cardboard. Una pieza de cartón que, ayudada de la pantalla de un smartphone, brinda una experiencia de realidad virtual algo primitiva. Será de plástico e incluirá sensores y un procesador que ayudará a que la experiencia sea más completa. Hemos de suponer que será una baza para expandir su ecosistema tras el lanzamiento de vídeos en RV para YouTube.
El kit autónomo sería la competición a los proyectos de HTC, Sony y Oculus — cuyo precio desató polémica — en realidad virtual, y la nueva versión del Cardboard podría competir con la propuesta asequible de Samsung Electronics: el Gear VR.
Es una sorpresa que Google esté desarrollando un kit totalmente diferente al de la competencia, pero tiene sentido si quiere que la experiencia sea igual de buena para todos sin tener en cuenta la pantalla o poder computacional de su smartphone; menester que Google, a diferencia de Samsung, no puede controlar.
Google y otras empresas han distribuido más de 5 millones de visores de cartón para la realidad virtual, permitiendo que los ajenos a la tecnología puedan hacerse una idea de qué se ofertará en el futuro con kits dedicados vendidos a cientos de dólares. Para Alphabet, la realidad virtual es una gran posibilidad de rentabilizar sus esfuerzos en hardware y software. Algo que ya pudimos conocer hace unas semanas.
Pese a que la realidad virtual no ha hecho más que dar sus primeros pasos, el interés de las grandes empresas de tecnología y producción de contenidos ha quedado patente a lo largo de estos dos últimos años con fuertes inversiones de Hollywood y compañías como Facebook o Samsung.
Fuentes familiares con el desarrollo aseguran que el kit estará compuesta de una pantalla, potentes procesadores y cámaras. Google planea usar estas cámaras para realizar el seguimiento del movimiento de la cabeza del consumidor al igual que lo hace Oculus junto a la ayuda de un potente ordenador.
No se sabe cuándo será presentado. Alguien cercano al proyecto dice que podría salir este año, otros son más cautos y no se atreven a estimar una fecha. El nuevo cardboard sí que podría estar presente en mayo, gracias a la conferencia de desarrolladores que se hospeda de forma anual.