Star Wars: Episode VII – The Force Awakens ha sido una auténtica revolución. Durante los meses previos al estreno de la película se generó un hype espectacular entre la comunidad de fans de la saga. Ahora que la cinta lleva semanas estrenada y con los datos en la mano podemos decir claramente que ha sido todo un éxito. De la misma manera ha pasado con la campaña social del Desafio Duracell que la marca de pilas había lanzado por toda Latinoamérica. El objetivo de participación para llenar el sable láser de luz ha sido rotundo y gracias a ello, toda la comunidad ha colaborado por mejorar la vida de miles de niños en varios países latinos.
De acuerdo con la UNICEF, existe un total de 2.200 millones de niños en el mundo de los cuales, 170 millones son huérfanos: 71 millones de ellos viven en Asia, 59 millones en África, 9 millones en América Latina y el Caribe y 31 millones se encuentran en la India. Los causantes de esta tragedia son las muertes por SIDA, la pobreza extrema, los desastres naturales, los conflictos bélicos, la violencia intrafamiliar y de género, el consumo de drogas, la explotación sexual, la trata de personas y la migración.
Los esfuerzos de la organización se centran en cuidar de los niños que han perdido a su familia
Duracell ha trabajado en esta campaña junto con Aldeas Infantiles SOS, una organización sin fines de lucro, no gubernamental e independiente, que trabaja por el derecho de los niños a vivir en familia. Esta organización desarrolla su labor en el mundo desde 1949 y actualmente lleva adelante sus programas en 133 países y territorios, dentro del marco de la Convención sobre los Derechos del Niño de las Nacionales Unidas (CDN).
En Latinoamérica y El Caribe están presente en 20 países con un total de 247 programas: México, El Salvador, Nicaragua, Panamá, Costa Rica, Honduras, Guatemala, Jamaica, Haití, República Dominicana, Colombia, Ecuador, Perú, Venezuela, Argentina, Bolivia, Paraguay, Chile, Brasil y Uruguay. Actualmente en la región brindan acogimiento a más de 12.000 niños que han perdido el cuidado de sus familias y trabajan con más de 110.000 niños, niñas, adolescentes, jóvenes y sus familias en programas de fortalecimiento familiar.
Hace poco más de un mes dimos a conocer esta misma campaña cuando justo había comenzado. Ahora que se ha conseguido el objetivo solidario es hora de dar las gracias a toda la comunidad de participantes que han dejado su huella en este desafío.