2100 es un año muy lejano, y puede que si no cambiamos las cosas el dicho de cualquier tiempo pasado fue mejor tendrá todo el sentido del mundo. A pesar de la negación de muchas partes importantes involucradas en el proceso, el cambio climático es una realidad y en Climate Central han tenido a bien elaborar unos gráficos para ver cómo será el invierno y el verano en el norte de América (algo aplicable a otras regiones de la misma latitud).
Y lo cierto es que 2100 no pinta nada halagüeño para las futuras generaciones si el cambio climático continúa al ritmo actual. Nuestras futuras generaciones. Tal como podemos leer en FastCo. Design, para crear estos mapas se han utilizado los datos de DayMet para realizar proyecciones de 1001 temperaturas para ciudades de los Estados Unidos, datos promedio de invierno y sus contrapartidas de verano, para luego ser comparadas con los datos del escenario RCP8.5 de la ONU, que es el modelo que se utiliza para realizar las proyecciones si se mantienen las emisiones de CO2 actuales.
La buena noticia es que no es tarde para cambiar este pronóstico, por lo que si no quieres ver tu ciudad cubierta por el agua o enterrada bajo la nieve en invierno, quizás es el momento de empezar a cambiar las cosas. 2100 es un año muy lejano, pero la realidad es que está a poco más de 80 años: