La caja fuerte, o bóveda, de Disney (Disney Vault, en inglés) es el término empleado para denominar la política de moratoria de Walt Disney Studios sobre sus películas de dibujos animados, según la cual las películas animadas de Disney son puestas a la venta durante un tiempo limitado, después del cual son puestas en la "bóveda" y dejan de estar disponibles en tiendas por varios años hasta que son liberadas de nuevo.
Esta política tuvo su origen en la práctica de Disney de re-lanzar sus películas animadas en cines cada cierto número de años, comenzando con el relanzamiento de Blanca Nieves y los Siete Enanitos (de 1937) en el año 1944. Con las nuevas tecnologías y formatos, esta práctica se ha extendido a las ventas en otros formatos, como Blu-ray, y la creación de las líneas Platino y Diamante, que contienen aquellas películas que salen de la bóveda temporalmente.
Si bien la compañía ha declarado que este proceso se lleva a cabo para permitir que nuevas generaciones disfruten de las películas clásicas durante su niñez, se considera que la bóveda de Disney **es una forma de generar escasez artificial a través del uso de moratorias. En la industria del entretenimiento, el término "moratoria" se refiere a la práctica de dejar de vender un determinado producto en DVD, VHS y Blu-ray luego de un cierto período. Si bien Disney es la compañía con prácticas más extendidas de moratoria, otras empresas también lo han puesto en práctica, como Universal Pictures con Volver al futuro y Lucas Fims con Star Wars.
Las prácticas de moratoria tienen la finalidad de generar expectativa en los consumidores y de conservar un carácter de "especial" para un producto al hacer que no esté disponible todo el tiempo**. Sin embargo, esta práctica da lugar a precios de venta más altos cuando los videos salen de la bóveda. Los videos que son puestos en moratoria se convierten en artículos de colección en los períodos en que no están disponibles.
El analista de la industria del entretenimiento Tony Adams dice que parte del éxito de Disney en el mercado infantil se debe a su política de moratoria:
"Creas anticipación, y de ese modo aún tienes la oportunidad de cobrar el precio completo. Si lo mantienes en los anaqueles, la única opción que te queda es seguir bajando el precio cada vez más."
De este modo, durante el período de moratoria, si quieres encontrar una de estas películas **sólo te queda la opción de buscarla a precio de reventa en eBay o un sitio similar. Esto, por supuesto, eleva muchísimo los precios. Pero la tecnología sigue avanzando, y los torrents están ahí al alcance de la mano: se ha comprobado que las políticas de moratoria aumentan las descargas P2P sustancialmente.
Algunos analistas teorizan que es posible que la creación de escasez artificial con respecto a ciertas películas en específico deje de funcionar con la actual sobreabundancia de oferta en otras películas para niños que están siendo lanzadas por primera vez.* La demanda, señalan, podría no estar ahí cuando la necesites. Sin embargo, si Disney sigue usando la bóveda es porque le sigue funcionando, incluso si es a costillas de los nostálgicos que aún quieren intentar que sus hijos se enamoren de 101 dálmatas o que tienen una necesidad imperiosa de volver a ver La Sirenita.
Mientras la política sigue existiendo, es importante saber que Aladino acaba de salir de la bóveda hace apenas un par de semanas, y Pinocho saldrá en enero de 2016. Por otra parte, Cenicienta, La Sirenita, El libro de la selva y 101 Dálmatas* están programados para entrar de nuevo en la bóveda en abril de 2016. Disfrútalos mientras puedas.