Ya hemos hablado varias veces sobre el trasplante de órganos. Es un tema complicado tanto por sus implicaciones éticas como por cuestiones técnicas. Teniendo en cuenta que cualquier esfuerzo por salvar a una persona es poco, cualquier herramienta que ayude a ello supone un recurso valiosísimo. Así lo ha demostrado, por ejemplo, el Organ Care System, una máquina capaz de mantener con vida un órgano "muerto" de manera que podamos estirar las posibilidades de supervivencia de un paciente. Una "caja" donde guardar los órganos donados hasta que puedan llegar a su destino y salvar una vida.
Clínicamente muerto
En ocasiones el cuerpo humano falla. Las razones son muchas y numerosas pero existen dos grandes razones que declaran a una persona como clínicamente muerta, al menos desde el punto de vista de los cirujanos: cuando el cerebro deja de funcionar o cuando se para el corazón. La muerte de una persona, sin embargo, puede suponer la vida de otra. Al morir, muchos de los órganos de un donante quedan a disposición de las necesidades. Sin embargo, el proceso de extracción y conservación es complejo y difícil de llevar a cabo. Cuando un corazón deja de latir, los nutrientes y el oxígeno deja de llegar al resto del cuerpo. Los órganos, sus células, van ahogándose lentamente. Al final, el propio corazón es el que sufre estas cLa extracción de un órgano no es suficiente para que llegue sano a su destino
onsecuencias y en unos minutos el tejido comienza a morir, quedando dañado de manera irreparable.
En tal caso, el esfuerzo se ha perdido, junto con dos vidas en vez de una. Sin embargo, el Organ Care System permite estirar las posibilidades de supervivencia de un órgano como el corazón. Para ello, el órgano puede ser extraído e insertado en el aparato en apenas 20 minutos, conservando su salud. Una vez enganchado, el corazón comienza a latir de nuevo, siendo insuflado con oxígeno y nutrientes. Esto permite que se conserve como si se encontrase dentro del cuerpo, sobreviviendo un valioso tiempo adicional.
Así funciona el Organ Care System
Básicamente, el Organ Care System consiste en una caja estéril conectada mediante tubos a un sistema que suministra oxígeno y nutrientes. Estos tubos se conectan a su vez al órgano en cuestión, de manera que suministran lo básico, como si el órgano se encontrase dentro del organismo. También hace falta una ligera electro estimulación, en el caso del corazón, cosa que se puede conseguir con un marcapasos añadido al dispositivo. Y es que el Organ Care System no solo puede contener corazones, sino que también sirve para pulmones o riñones, entre otros.
La finalidad, como decíamos, es alargar la vida útil de los órganos de transplante con la intención de aumentar las posibilidades de supervivencia de un paciente. Hasta el momento el Organ Care System ha sido empleado con éxito en 15 trasplantes de corazón de Reino Unido y Australia. El ingenio ha sido desarrollado por una empresa privada pero sus 250.000 no son un precio excesivo si tenemos en cuenta los grandes problemas existentes con los trasplantes. Especialmente en los de corazón, cuyo origen suele ser únicamente fallecidos por muerte cerebral, ya que el órgano ha sufrido menos daño y todavía es El origen de los corazones para trasplantes suelen ser fallecidos por muerte cerebral
recuperable.
Pero esto deja un número verdaderamente reducido de corazones disponibles. Y es que se realizan miles de transplantes de corazón al año, uno de los órganos más afectados al ser el protagonista de algunas de las enfermedades más recurrentes de nuestro tiempo. Con el uso de este dispositivo y la técnica adecuada la cifra de éxito podría aumentar entre un 15 y un 30%, opinan los cirujanos. Un número que puede parecer pequeño pero que se traduce en cientos de pacientes que morirían si no se usase un dispositivo como éste.