Microsoft acaba de publicar los resultados del tercer trimestre fiscal de 2015. La compañía ha cerrado el trimestre con $21.700 millones de ingresos y $5.000 millones de ingresos netos. Los ingresos se han incrementado un 6% con respecto al mismo periodo del año anterior, pero los beneficios han caído un 12%. Hemos de tener en cuenta que Microsoft incluye en los resultados los $190 millones de gasto en la integración y reestructuración consecuente del acuerdo por la división de telefonía móvil de Nokia.
Analicemos un poco las diferentes divisiones. Los ingresos derivados de Dispositivos y Consumo crecieron un 8% hasta los $9.000 millones, destacando:
Los suscriptores a Office 365 llegan a los 12.4 millones, un crecimiento del 35%. Baja un 19% los ingresos de Windows OEM Pro. Bajan un 26% los ingresos derivados de Windows OEM no-Pro. Los ingresos de publicidad en su buscador crecer un 21%, con un market share de 20.1% de Bing en los Estados Unidos. El uso de Xbox Live crece más del 30%. Los ingresos de la gama Surface llegan a los $713 millones, creciendo un 44% respecto al ejercicio anterior gracias a la Surface Pro 3. * Se han vendido 8.6 millones de Lumia con un ingreso de $1.400 millones.
Sorprende el crecimiento de la familia Surface, aunque Microsoft no separe por modelos se puede observar el salubre crecimiento del híbrido entre portátil y tablet de Microsoft.
Dentro de la división gaming con Xbox, Microsoft no ha publicado cuantas consolas ha vendido este trimestre. No se separan las ventas entre Xbox One y Xbox 360, ni se cuenta la combinación de ambas. Sí que indica una caída del 24% YoY con respecto al mismo periodo en 2014. Y es que Sony parece no tener rival en la guerra de la next-gen.
Las pérdidas en Windows OEM no sorprenden, reflejo de la constante bajada de demanda de ordenadores personales en el mercado.