¿Eres alérgico? Seguro que la primavera puede hacer estragos en ti, estornudos, picores, lagrimeo... imagina estos síntomas dentro de un coche: un desastre. Estornudar repetidamente es un peligro mucho más grave del que nos pensamos porque cerramos los ojos durante unos segundos que pueden ser decisivos ante un accidente. Pero las alergias primaverales pueden tener solución en algunos coches como en el nuevo Ford Mondeo gracias a los nuevos filtros de aire.
Volker Scheer, experto técnico en Medio Ambiente y Salud de Ford Europa: “Quizás el aire fresco no sea un reclamo para los conductores en un primer momento, a diferencia del diseño o la conducción de un coche, pero sí es un factor importante en la calidad de la experiencia de conducción de los coches Ford equipados con este nuevo filtro. Es un 50% más efectivo que su predecesor a la hora de bloquear partículas ultra finas, cuyo grosor es la milésima parte de un cabello humano”.
Un estornudo puede suponer que a una velocidad de 95 km/h se conduzca “a ciegas” una distancia de hasta 20 metros.
La calidad de este nuevo filtro es similar al que se puede encontrar en modelos de lujo o representación pero en este caso ha sido desarrollado para una berlina media que destaca desde el punto de vista tecnológico, tal y como te contamos cuando reseñamos el coche.
Para que las alergias primaverales no te afecten dentro del coche se ha desarrollado este filtro de aire basándose en las máscaras antigás, respiradores y trajes especiales, tres artículos que tienen como denominador común al carbón activado. En conjunción con el filtro se ha añadido un sensor de calidad del aire que cierra la entrada del mismo al coche en caso de que los niveles de monóxido de carbono y dióxido de nitrógeno en el exterior del coche sean muy elevados.
Este filtro de aire es capaz de bloquear hasta el 99% de polen, los malos olores, gases contaminantes y el dióxido de nitrógeno que daña a los asmáticos. Para desarrollarlo se hicieron numerosas pruebas en el Centro Europeo de Investigación de Ford en Aachen (Alemania) para comprobar su eficacia pero también su duración. En este aspecto el filtro para que sea útil debe cambiarse cada dos años o 30.000 kilómetros.