Buenas noticias, una de las primeras vacunas contra el ébola ya ha mostrado los resultados de su primera fase clínica, con seres humanos. De los 60 pacientes, todos desarrollaron anticuerpos contra el virus.
La primera fase clínica se ha realizado con un grupo pequeño de voluntarios y afectados. La siguiente fase consistiría en realizar las pruebas con un grupo mayor, de varios centenares. De esta manera se puede acotar la efectividad y los posible peligros que la vacuna contra el ébola pudiera esconder. Esta vacuna es una de las varias en desarrollo por diversas empresas farmacéuticas, las cuales, tras la crisis de hace unos meses, han acelerado el proceso de investigación hasta alcanzar un ritmo asombroso. De hecho, si todo va bien, podría comenzar a administrarse la vacuna, en la tercera fase clínica, a finales de este año o incluso antes.
Así funciona la vacuna contra el ébola
El laboratorio GlaxoSmithKline es el responsable de la vacuna de la que hablamos, aunque, como decíamos, no es el único que se encuentra desarrollando una candidata efectiva como vacuna contra el ébola. Sin embargo, en este caso, parece que todo ha ido a pedir de boca. Según el último estudio realizado, no efectos secundarios notables ni peligrosos. De los 60 pacientes, solo dos sufrieron de fiebre y dentro de unos parámetros normales. Esto anima al equipo a La vacuna usa una cepa inactivada de adenovirus 3 de chimpancé
continuar adelante en la búsqueda de una solución para los casi 8000 afectados por el ébola en África.
Para desarrollar la vacuna contra el ébola, el equipo ha empleado un "virus frío", es decir, una cepa inactivada del adenovirus 3, también conocido como ChAd3. Este virus propio de chimpancés ha sido modificado para que produzca la proteína específica del la cepa de ebolavirus Zaire, que es una de las más letales y extendidas, especialmente en el oeste africano. El desarrollo de esta vacuna es bastante ingenioso ya que se obliga a un virus que no es propio de seres humanos a producir algunos componentes, teóricamente inocuos, del letal virus para que nuestro sistema inmunitario recuerde su presencia. De esta manera, al ponernos en contacto con el virus, gracias a esta vacuna contra el ébola, estamos protegidos de antemano y no permitimos que el virus se extienda.
Fases clínicas
Por supuesto, ésta es solo la primera fase clínica, realizada sobre un pequeño grupo controlado de personas. De hecho, solo 60 individuos escogidos en Reino Unido. Pero cabe esperar que la vacuna contra el ébola funcione igual de bien para el resto de pacientes. La teoría es buena. La producción de la proteína diana por parte de un virus inofensivo no debería dar problema alguno. No obstante, varias cosas pueden salir mal y tirar todo el trabajo a la basura. Nuestro metabolismo es muy complejo, así que es muy difícil saber cómo reaccionará en cada caso particular. Por ello mismo, la siguiente fase consistirá en hacer pruebas más extendidas pero con Algo podría salir mal en el resto de fases clínicas
un grupo bastante mayor. De esta manera se puede comprobar el espectro de reacciones de una manera más fiable.
También puede ir conociéndose la dosis adecuada. En esta primera fase, los 60 participantes han sido inoculados con diferentes concentraciones, pero hay que afinar dicha cantidad para reducir al mínimo los efectos secundarios y maximizar el efecto. La tercera fase clínica, si tenemos suerte, permitirá el tratamiento controlado de una gran cantidad de población. Si todo fuese como se espera, probablemente podríamos aplicar la vacuna de forma masiva, pero controlada, a finales de este año. ¿Estamos en comienzo del fin de la crisis del ébola? A nivel técnico podríamos decir, muy optimistamente, que sí. Pero ya veremos como se desarrollan los acontecimientos.