Hay vida más allá de Roomba. Muchos de nosotros tan sólo conocíamos a iRobot por su gama de productos destinados al hogar pero hay mucho más. Tal y como nos explicó su CEO en la última demostración de productos de la compañía, iRobot se centra en tres sectores principalmente: hogar, presencia remota y seguridad. Es en este último sector donde las tecnologías son tremendamente exigentes ya que hablamos de entornos de combate donde el más mínimo fallo puede suponer la pérdida de vidas humanas. Para ello la compañía pone todas sus patentes a disposición de la seguridad, dando lugar a piezas tecnológicas como el iRobot 110 FirstLook. UGV, vehículos terrestres no tripulados destinados a uso militar
En Gizmología hemos tenido la suerte de probar este robot que ha supuesto un punto de inflexión para los cuerpos de seguridad de todo el mundo.
El mundo de los robots terrestres no tripulados (UGV) siempre ha estado muy presente en nuestra cultura popular. Los UGV más conocidos son sin lugar a dudas, los robots utilizados por los miembros de las unidades de zapadores o desactivadores de explosivos. Una forma de poder acercarse y manipular un artefacto que puede estallar sin necesidad de exponer a una persona. Según iRobot, en todo el mundo se han suministrado miles y miles de UGV a fuerzas civiles y militares de todo el mundo con el objetivo de ayudar en las tareas de búsqueda, reconocimiento, desactivación de explosivos y todo tipo de misiones que pondrían la integridad de una persona en peligro. Entre ellos el iRobot 110 FirstLook.
Este robot, que a simple vista parece un juguete todoterreno muy caro, se trata del UGV de tamaño más reducido y ligero de toda la gama de productos de la compañía. Es un dossier oficial, el iRobot 110 FirstLook está especialmente diseñado para "infantería y misiones de operaciones especiales, incluyendo limpieza de edificios, redadas y otros tipos de escenario". Pero, ¿qué ofrece este pequeño robot? Pese haber caído escaleras abajo seguía funcionando como si nada
Resistencia sin igual.
En las pruebas que pudimos realizar, miembros del equipo de desarrollo de iRobot nos pidieron por favor que lo lanzásemos escaleras abajo. Sin miedo y con fuerza, el iRobot 110 FirstLook rebotó hasta caer la altura de un piso golpeándose en todo momento contra las numerosas esquinas de las escaleras. Cuando llegó al final, no tuvo más que volver a ponerse de pié gracias a las dos piezas de plástico triangulares en los extremos y comenzar a funcionar. Una demostración de cómo de resistente es. Además también es resistente al agua pudiendo sumergirse hasta 3 metros en casi cualquier líquido y seguir funcionando.
En cuanto a su funcionamiento, el mando (también con el mismo precepto de resistencia que el UGV), permite maniobrar casi en cualquier situación el vehículo a una distancia considerable. Incorpora una pequeña pantalla de 5 pulgadas para poder ver en todos los ángulos, gracias a las cuatro cámaras infrarrojas del iRobot 110 FirstLook. El objetivo no es otro que lanzar el robot a través de una ventana u orificio y comenzar la exploración sin necesidad de más que un operativo humano detrás de los mandos.
Su aplicación práctica se pondrá a prueba de nuevo en el Mundial de Fútbol de Brasil, donde el iRobot 110 FirstLook junto con otros vehículos terrestres no tripulados ayudarán a los cuerpos de seguridad realizando todo tipo de misiones.