Proyectos como Raspberry Pi y Arduino se han hecho muy populares entre los aficionados a la electrónica y la computación. Ambos proyectos, además de ser la base de muchos proyectos creativos, son también los pilares sobre los que se apoyan muchos docentes para introducir a los escolares en el mundo de la programación y la computación; dos proyectos que permiten crear aulas de informática sin que el coste sea ya una barrera de entrada. Siguiendo esta senda, y con el objetivo de llevar también la computación a las aulas, Intel ha presentado en Roma el Proyecto Galileo, una placa de desarrollo que nace gracias a un acuerdo de colaboración con Arduino LLC.
En el marco de la Maker Faire de Roma, Brian Krzanich, CEO de Intel, ha presentado esta colaboración de la compañía con Arduino LLC, uno de los mayores exponentes del hardware libre. Intel Galileo es el fruto de esta colaboración, un sistema de desarrollo que se convierte en la primera placa de arquitectura Intel que es compatible con Arduino.
Intel Galileo
Intel Galileo es la primer kit de desarrollo de arquitectura Intel que es compatible con Arduino; un sistema que es capaz de funcionar con una versión de Linux que contiene las librerías de software de Arduino y, por tanto, operar con este sistema y reutilizar código ya existente.
A nivel de hardware, Intel Galileo está basado en el SoC (system on chip) Intel Quark X1000, un sistema de bajo consumo que consta de un procesador pentium de 32 bits de un único núcleo y un único hilo que es capaz de funcionar a una frecuencia de hasta 400 MHz. Con respecto a los puertos y conexiones disponibles en el sistema, se incluye una tarjeta de red Ethernet 10/100, un lector de tarjetas SD, puertos USB 2.0, puerto serie RS-232, una memoria flash de 8 MB, un puerto JTAG para facilitar la depuración de software e, incluso, interfaz PCI Express.
Además de la placa física, Intel ha desarrollado un SDK que está disponible tanto en OS X, Windows y Linux y también se permite el uso del SDK Arduino IDE, por tanto, el usuario tendrá un amplio abanico de opciones para trabajar con este sistema que, por cierto, estará disponible a finales del mes de noviembre.
Objetivo: la educación
Los kits de desarrollo no son algo nuevo; son placas basadas en microprocesadores que se vienen fabricando, prácticamente, desde el desarrollo del primer procesador. Sistemas orientados a conocer un procesador en concreto, realizar aplicaciones de prueba y, tras el aprendizaje, trabajar en proyectos basados en este tipo de sistemas.
Con este objetivo, Intel aprovechó la presentación del Proyecto Galileo para anunciar una gran donación a universidades de todo el mundo. El fabricante de chips donará 50.000 placas Intel Galileo a 1.000 universidades durante los próximos 18 meses; un guiño al sector de la educación para fomentar el interés entre los estudiantes y, por supuesto, modernizar las dotaciones de muchas universidades cuyos kits de desarrollo están "anclados en pasado tecnológico" (sirva como referente que, yo mismo, me eduqué con kits de desarrollo del veterano Motorola 68000.
La iniciativa, sin duda, es muy interesante porque aúna a un fabricante como Intel con la fuerza y la flexibilidad del hardware libre; una colaboración que ojalá no cese y se siga profundizando porque este tipo de iniciativas que permiten eliminar barreras de entrada y romper con la brecha digital son algo muy necesario para formar a las generaciones que trabajarán, en el futuro, en empresas como Intel o Google.