Tanto en España como en Latinoamérica hay mucho talento y muy buenas ideas de negocio que se materializan en forma de startups que trabajan y crecen en el ecosistema de Internet. Aunque se tienda a pensar que las startups surgen únicamente en Estados Unidos, estamos viviendo una apasionante época en la que emprendedores de España y Latinoamérica han perdido el miedo a lanzarse a la aventura de crear servicios innovadores y, gracias al apoyo de incubadoras y aceleradoras, dar el gran salto para internacionalizar sus servicios y codearse con inversores de Nueva York o de Silicon Valley.
Moodyo es una de estas startups que lleva tiempo trabajando duro para dar el gran salto y buscar apoyos y financiación en Estados Unidos. Una startup de España que, cual hormiga, ha trabajado durante meses para ofrecer un producto sólido y con muchas posibilidades; un buen ejemplo que nos demuestra que hay mucho talento por descubrir dentro del ecosistema de startups de España y Latinoamérica.
El equipo de Moodyo está, desde hace varias semanas, en Nueva York participando en varios encuentros y eventos para localizar inversores e internacionalizar las operaciones de la empresa. Un ambicioso proyecto que nació en la sevillana ciudad de Dos Hermanas que dio el gran salto el pasado mes de abril al Startup Alley de Nueva York (organizado por TechCrunch) y que se ha marcado como objetivo establecer sus operaciones comerciales en Estados Unidos y realizar el desarrollo tecnológico de su producto en España y fomentar, por tanto, la tecnología made in Spain.
Antes de partir a Nueva York, tuvimos la ocasión de pasar una tarde en las oficinas de Moodyo en Dos Hermanas (Sevilla) y hablar con su CEO, Javier Padilla, de su producto, el recorrido de la compañía, sus planes de crecimiento y cómo es posible emprender en una de las regiones con mayor tasa de desempleo de España y "cruzar el charco" para presentar tu producto a grupos de inversión estadounidenses.
ALT1040 - ¿Qué es Moodyo? ¿Cómo definiríais vuestra actividad?
Javier Padilla - Moodyo es compra de forma inteligente con ayuda de tus contactos. Si yo tardase mucho más en definirlo no tendría claro lo que es Moodyo y, por tanto, no podría ser capaz de presentárselo a un inversor.
ALT1040 - ¿Cómo surge Moodyo? ¿Cuál es su historia?
Javier Padilla - La idea surge en 2007 pero no nos pusimos a trabajar en ella hasta la navidad de 2009. Al realizar los primeros bocetos llegué a la conclusión que, aunque sabía programar, para llevar la idea a la práctica íbamos a necesitar un ingeniero para que la dotase de una arquitectura sólida.
Por tanto, decidí buscar un socio tecnológico y como había trabajado con Álex en otros proyectos como freelance y también colaborando entre nuestras empresas le enseñé los bocetos en enero de 2010. Al ver los diseños, Álex me comentó que le gustaba la idea y que quería colaborar (que en el fondo era lo que estaba buscando) como socio de la empresa.
"Cuando no estás emprendiendo en un proyecto a tiempo completo se avanza lentamente"
Para poder implementar una primera versión de Moodyo visible tuvimos que emplear un año porque estábamos trabajando en la idea en nuestros ratos libres y eso era inviable. Cuando no estás emprendiendo en un proyecto a tiempo completo los proyectos van lentos. Por aquel entonces yo trabajaba en la dirección técnica del diario ABC en Sevilla, Álex trabajaba en una consultora y decidimos marcharnos de nuestros respectivos trabajos para apostar por Moodyo así que en mayo de 2011 ya estábamos en esta oficina aquí sentados trabajando.
En verano de 2011 decidimos ponernos en contacto con Enrique Dubois de la incubadora Mola y fuimos a verle a Mallorca. Durante la reunión Enrique nos comentó que la idea le parecía buena pero que, eso sí, buscaba equipos que fuesen flexibles y tuviesen la mente abierta para hacer cambios y perfilar la idea. En principio, Moodyo era una red social de regalos y Enrique nos dijo que el futuro estaba en el social shopping. Por aquel entonces, el social shopping se estaba modelando como "compro y comparto" pero la información de valor estaba dispersa entre foros con recomendaciones, catálogos de productos, listas de regalos... y ahí pensamos que Moodyo podía conectar toda esta información.
ALT1040 - ¿Cómo fue vuestra primera presentación de Moodyo en un acto orientado a inversores y startups?
Javier Padilla - En febrero de 2011, antes de dedicarnos al 100% a Moodyo, decidimos llevar el proyecto a Tech Media Europe que se celebraba en Oporto (Portugal), un evento en el que presentábamos el proyecto a inversores de fondos de capital-riesgo. Era la primera vez que nos enfrentábamos a una presentación así y allí nos dimos cuenta que las presentaciones que habíamos preparado no valían; habíamos gastado 600 € en material de papelería que no valían.
Los inversores de aquel evento nos guiaron y nos comentaron que el producto era bueno y nos dieron algunas pautas que seguir a la hora de presentar el proyecto. Al final resultó que ganamos un premio y ese fue el momento en el que tuvimos claro que teníamos que dedicarnos a 100% al proyecto.
ALT1040 - Moodyo en cierta forma es un caso singular porque os lanzásteis a emprender directamente. ¿No os llegáisteis a plantear pasar por un programa de aceleración de startups?
Javier Padilla - Si hubiese empezado con Moodyo hace 5 o 6 años, seguramente habría pasado por una incubadora de empresas. Al yo tener mi propia empresa que funcionaba bien y tener mi cartera de clientes, quería orientar mi empresa para que fuese la incubadora de Moodyo ya que tenía experiencia en poner en marcha proyectos de Internet con El Desmarque.
Por tanto, el know-how ya lo había adquirido por mi cuenta y había hecho contactos en esta época profesional como para poder caminar de una manera algo más recta. De hecho, aunque estamos vinculados a Mola, que es una incubadora de empresas, tenemos bastante margen de maniobra y aunque todo lo consultamos con Enrique aspectos como la contabilidad, por ejemplo, la llevamos nosotros directamente. La financiación también la buscamos nosotros aunque poder decir que Enrique Dubois es socio (tiene el 10% de la empresa) te abre muchas puertas.
"Si no eres capaz de resumir tu idea en una sola frase, tu idea de producto no sirve"
De todas formas, a las startups les recomendamos que pasen por una incubadora porque allí llegas con una buena idea y te enseñan a que si no eres capaz de definirla en una sola frase, entonces, no te sirve para nada. La incubadora de empresas te puede enseñar desde esto hasta buscar financiación, ser flexibles y dejarse guiar por el mercado o por las analíticas. Los mentores te pueden ayudar a orientar tu producto, te inyectan un pequeño capital semilla y te ponen el órbita de pequeños inversores.
Yo me hubiese ido a una incubadora si no hubiese contado con mi empresa. Me fui a una incubadora tras un año de andadura para hacer crecer Moodyo como empresa.
ALT1040 - La primera búsqueda de financiación ¿es una misión imposible?
Javier Padilla - El capital inicial procedía de mi primera empresa pero, a finales de 2011, comenzamos también a buscar financiación y a dedicar, prácticamente, los ingresos de los trabajos que hacía mi empresa a dar forma a Moodyo e implementar la plataforma que teníamos en mente hasta lanzar la primera beta de Moodyo en noviembre de 2012 (tras lanzar dos primeras versiones que nunca llegaron a despegar).
Esta primera ronda de financiación y el lanzamiento de la primera beta nos permitió, además de sufragar las infraestructuras y la estructura de la empresa, ampliar el equipo técnico y de comunicación y marketing del proyecto.
En los últimos 3 o 4 años se han especializado muchos los inversores en España pero piden una excesiva tracción; asumen muchos menos riesgos que los inversores de Estados Unidos. El inversor de aquí prefiere que tengas una base sólida que, al final, no puedes conseguir si no tienes la inversión; precisamente, por estos motivos decidí autofinanciarme y ajustar mis gastos para vivir y poder invertir en Moodyo.
ALT1040 - Con el lanzamiento de la primera versión beta de Moodyo, ¿qué estrategia os planteáis para daros a conocer y captar usuarios?
Javier Padilla - Con el lanzamiento de esta beta de Moodyo que comenzaba a crecer decidimos darnos a conocer entre bloggers y creadores de tendencia, es decir, gente que con conocimiento en determinados productos cuyas opiniones podían ser de utilidad para otros usuarios. En medio de esta vorágine llegó Pinterest y el concepto de esta red social estaba muy alineado con lo que hacíamos nosotros y la gente, rápidamente, asumió la práctica de entrar en una web y marcar que algo le gustaba y anotarlo en un board.
Plantear las cosas de manera muy sencilla, entrar en una web y decir "lo quiero", conectar esto con Facebook y Twitter (sin intentar competir con ellos porque no hay nada que hacer) te hace marchar por una especie de "campo de meteoritos" donde todo el mundo avanza muy rápido y donde no te puedes quedar atrás pero tampoco puedes hacer lo mismo que el resto.
ALT1040 - ¿Para que una startup crezca debe poner el foco en Estados Unidos?
Javier Padilla - Una de las cosas que teníamos claras en Moodyo era que para crecer teníamos que tener presencia en Estados Unidos o, al menos, intentarlo. No se trataba únicamente de tener la página web en inglés; había una serie de connotaciones culturales que había que tener en cuenta porque hay cosas que se pueden no entender o incluso llegar a ofender al público estadounidense. Para un usuario de Estados Unidos, Internet tiene que estar en inglés y ver la descripción de un producto o su nombre en español le provoca rechazo; de hecho, hemos cambiado recientemente el diseño de Moodyo para adaptarnos a este tipo de requisitos.
Uno de los miembros de nuestro equipo, Megan, es de California y ha estado por Silicon Valley presentando Moodyo al público estadounidense y a posibles inversores con la idea de abrir mercado, trabajar en la internacionalización de la plataforma y establecer una red de contactos en la zona.
"Los inversores de Nueva York siempre están mirando dónde invertir y toman las decisiones muy rápido. Si algo no les gusta te lo dicen directamente"
El ecosistema de startups de Silicon Valley es mucho más cerrado si lo comparamos con el de la ciudad de Nueva York. Nueva York es un foco muy interesante para los que estamos emprendiendo porque siempre están buscando dónde invertir y donde, además, las decisiones se toman muy rápido: si algo no les gusta te lo dicen y no te marean (al contrario que en España donde el "no" directo cuesta mucho).
Aunque no hemos recibidos muchos "no", esta dinámica nos ayuda mucho porque los inversores te dicen directamente que no invierten en tu idea porque ya han invertido en otro social shopping o porque eres una empresa pequeña para ellos. Los requisitos de acceso a un fondo de inversión en Estados Unidos son más altos que en España, un Bussines Angel invierte mucho más que aquí (llegan al millón de dólares cosa que aquí es imposible, más allá de los 200.000 euros de capital privado nunca vas a conseguir) pero te pedirán 80.000 usuarios frente a 20.000 usuarios que te podrían pedir en España.
Moodyo es una empresa europea pero no podemos renunciar a rendir donde tiene que rendir: Estados Unidos. El equipo estaba de acuerdo en movernos, a pesar de las connotaciones personales, así que decidimos presentarnos al Startup Alley en el mes de abril y empezamos a ver inversores con los que jamás pensamos que íbamos a poder hablar y allí que estaban a tu lado.
Allí conocí a Divya Narendra en uno de los encuentros de inversores, conoces a gente de ComCast, gente de Y-Combinator; gente que son de carne y hueso, que te escuchan y que te piden cosas distintas a las que piden en España. Los inversores de allí no se interesan tanto por la monetización sino por la actividad de los usuarios en tu plataforma, piensan que si tu servicio funciona ya ellos podrán conectarles "el mecanismo para ganar dinero".
"Los inversores de allí no se interesan por la monetización. Buscan el potencial de tu producto"
Los inversores de Estados Unidos buscan el potencial, igual que hizo Facebook con Instagram; en España se interesan más por las ventas que haces en tu plataforma y te miran más como una tienda online más que una intermediación con valor añadido (comentarios de otros usuarios, conexión social, etc). Además, los inversores tiene contigo un trato muy personal, te dejan que te expliques aunque cuando tienes que presentar tu idea te suelen dar poco tiempo (apenas 2 minutos) y plantean cosas muy directas: "¿No tienes versión móvil? Entonces ven a verme cuando la tengas".
A eso volvemos a Nueva York, a enseñar "los deberes que nos habían mandado" y buscar una inversión en Nueva York que apoye la ronda de inversión que hemos recibido en España y nos permita establecer el área de marketing y desarrollo de negocio en Estados Unidos y la Ingeniería en España.
ALT1040 - ¿Por qué países os habéis movido para buscar financiación?
Javier Padilla - Principalmente nos hemos movido por España y Nueva York. España porque es lo que conocemos y Estados Unidos porque es nuestro objetivo. Pensamos que siempre tendremos la oportunidad de movernos por Europa si las cosas no marchasen bien.
De todas formas, el 30 de octubre estaremos en Dublín y asistiremos al Web Summit invitados por el evento como caso de éxito.
ALT1040 - ¿Cómo habéis adaptado Moodyo al público?
Javier Padilla - Recientemente hemos adaptado el diseño de la web de Moodyo para evitar el choque que tiene para el usuario de Estados Unidos encontrarse los nombres de los productos o las descripciones de estos en español. Hemos apostado por un cambio en el que mostramos las fotos de los productos y, una vez entras en su ficha, se muestra en el idioma que tengas predeterminado.
"Para nosotros la analítica web es muy importante para verificar que funciona un diseño"
Además, estamos trabajando con empresas de Estados Unidos especializadas en testing de aplicaciones que nos envían vídeos en los que graban las sesiones que realizan y comentan los aspectos de diseño que consideran más complejos para el usuario o las cosas que no se entienden; una información que te ayuda mucho a la hora de ajustar tu diseño. El feedback de tu alrededor no te sirve para realizar este tipo de cosas y te tienes que basar en datos objetivos de analítica web o en estas pruebas de testing.
El peso de la analítica web en Moodyo es total, analizamos de dónde procede el usuario.
ALT1040 - ¿Cómo funciona el sistema de recomendaciones de Moodyo y la relación con bloggers?
Javier Padilla - El lector es muy sensible a los "publi-reportajes", las recomendaciones tienen que se sinceras. Si alguna vez contactamos con un blogger para que escriba o hable de Moodyo le pedimos que cuente lo que quiera, aunque cerremos un acuerdo para escribir una cantidad de posts determinados.
Las recomendaciones deben ser sinceras y la gente que ha colaborado con nosotros en dar a conocer Moodyo en esta fase beta lo ha hecho porque, realmente, estaba convencida con la plataforma. Al principio nos hemos movido en el sector de la moda pero ahora queremos darle más peso al de tecnología porque es muy susceptible a las reviews. Queremos colaborar con bloggers de tecnología para que seleccionen productos y los recomienden en Moodyo, por tanto, trabaja para nosotros analizando gadgets.
ALT1040 - ¿Por qué senda está caminando ahora Moodyo?
Javier Padilla - La información que generan los usuarios en Moodyo con los "me gusta" y "lo quiero" se puede explotar y podrá aportar mucha información de valor a las marcas y tiendas que trabajan con nosotros. El usuario, dentro de sus preferencias, podría marcar las opciones por las que quiere recibir notificaciones y las marcas, por ejemplo, podrían lanzar ofertas personalizadas y muy segmentadas que serían recibidas por usuarios que, realmente, tienen intención de comprar estos productos. Moodyo apuesta por la "compra inteligente" y por eliminar el spam de las "oferta genéricas".
"El social shopping puede hacer que las tiendas y marcas envíen ofertas personalizadas a los usuarios"
Alguien podría pasear por la calle y al pasar cerca de una tienda asociada a Moodyo podría recibir una alerta en su smartphone con una oferta personalizada o con un aviso de que el producto que quiere está a la venta en una tienda que está en sus inmediaciones.
ALT1040 - Hemos hablado de España y Estados Unidos como usuarios de Moodyo, ¿qué presencia tiene Latinoamérica en vuestro planes de negocio?
Javier Padilla - Sin haber hecho una campaña intensa, los países de Latinoamérica que más peso tienen en Moodyo son México, Argentina y Venezuela. Es cierto que el grueso de usuarios procede de España pero si nos centramos en el público que habla español, el 50% del público es de España y el otro 50% restante procede de Latinoamérica donde México, Argentina y Venezuela pueden ser el 40%.
Es curioso que, sin haber hecho campañas para dar a conocer Moodyo en Latinoamérica, tengamos esta presencia allí. En parte se debe a que una parte importante del público que sigue a algunos de los bloggers con los que hemos colaborado proceden, precisamente, de Latinoamérica y es algo que nos ha pasado mucho con los bloggers de moda. Latinoamérica es un público muy agradecido porque sin que hayamos realizado campañas de marketing enfocadas en este público, si ven que Moodyo les es interesante vuelven y se convierten en un público muy fiel.
Latinoamérica es un foco que no perdemos de vista, Brasil es un objetivo a tener muy en cuenta y, de hecho, si la inversión en Nueva York no prospera miraremos, sin duda, a este país. En Estados Unidos, precisamente, los inversores miran también a Brasil y el resto de Latinoamérica con mucha atención y en los encuentros de inversores en Estados Unidos vemos ya a muchos inversores procedentes de Brasil y México con intención de invertir en startups.
ALT1040 - ¿Han cambiado las cosas en España en estos años? ¿Comienza a verse una maquinaria sólida para financiar y lanzar startups?
Javier Padilla - El inversor de Estados Unidos aunque te diga que "no" nunca llega a separarse de tu idea si le parece interesante. Te ponen en contacto con otras redes de inversores que esté a tu nivel de empresa, te piden que le envíes feedback de tu empresa y los mantengas al tanto. Afortunadamente, en España ya se empieza a ver esto y el "no rotundo" pasa a ser "mantenme informado mes a mes" si la idea les interesa.
Las cosas ya, por fin, no son tan "imposibles". Hace unos años los fondos de capital-riesgo estaban muy cerradas al mundo online, ahora comienzan a abrirse un poco más pero el factor tiempo sigue siendo lento. En Estados Unidos una operación se puede llegar a cerrar en un par de semanas, en España puedes necesitar un par de meses y hay mercados que corren muy rápido y un plazo así puede ser fatal.
Todo el mundo monta una startup, aunque muchos lo nieguen, pensando en que venga una empresa grande y te compre; aún así, nuestra idea es seguir trabajando y no retirarnos a vivir a la playa. Si alguna vez vendiésemos Moodyo, reinvertiríamos el dinero en seguir haciendo cosas y en seguir trabajando. Cualquier incubadora invierte en ti pensando en que alguna empresa te compra y en el momento que entra capital-riesgo en tu empresa sabes que el destino final es la venta.
Ahora mismo no nos planteamos la venta, queremos que Moodyo sea algo grande y a la larga rentable.
"El nuevo Silicon Valley está en Nueva York. Allí te reciben con los brazos abiertos"
ALT1040 - ¿Dónde quisieras ver a Moodyo dentro de un año?
Javier Padilla - Dentro de un año me gustaría haber conseguido el objetivo de mover el desarrollo de negocio de la empresa fuera de España. El objetivo principal es llevarlo a Nueva York y si no fuese posible, al menos, llevarlo a Londres o a Brasil o a México. De hecho, si conseguimos tener presencia en Nueva York, en el plazo de dos años nos gustaría estar en Brasil o México también.
Por tanto, por una parte establecer el desarrollo de negocio, marketing y operaciones financieras en Nueva York y, por otro lado, la ingeniería y el trabajo técnico en España. Además, tenemos como objetivo conseguir que las tiendas y las marcas vean el beneficio de usar Moodyo para enviar ofertas segmentadas a los usuarios y cómo así pueden rentabilizar sus acciones y aumentar, incluso, sus ventas.
Hay que tener muy claro que los inversores de Estados Unidos solamente van a invertir en una empresa con base en Estados Unidos. Podrás mantener una filial en España pero el core del negocio tiene que estar en Estados Unidos y debes tener claro que vas a dejar España.
ALT1040 - ¿Como empresa os seguís considerando una startup?
Javier Padilla - Somos una startup y, además, la filosofía de una startup te ayuda a crecer tengas el tamaño que tengas. Creo que cualquier empresa debería adoptar los métodos de gestión de una startup; es decir, ser muy vertical en la gestión y evitar que cuando se pide algo esto tenga que pasar por múltiples niveles de gestión.
"La flexibilidad de una startup no la encuentras en la empresa tradicional"
La flexibilidad que tiene una startup no la tiene una empresa tradicional. En una startup no hay que pasar por siete comités para poner en marcha una idea; de hecho, algo parecido le pasa a los medios tradicionales si los comparas con los blogs y los medios en Internet.
Estar cambiando continuamente o pivotar en el momento adecuado es algo que a cualquier empresa le vendrá bien; nosotros somos una startup y queremos seguir funcionando como tal aunque una startup tiene mucho desgaste y pasa factura. Recomiendo a todos los emprendedores hacer deporte para coger fuerzas, despejarse y poder trabajar.
Para nosotros la innovación es el core de Moodyo y si tenemos que invertir en que alguien tenga que dedicar tiempo en aprender una nueva tecnología, reforzar su dominio del inglés o adquirir nuevos medios materiales es algo que tenemos muy asumido y vamos muy rápido en eso.