Conceptos como el crowdfunding y el crowdsourcing se han hecho muy populares entre los usuarios de Internet; recurrir a pequeñas colaboraciones para poner en marcha un proyecto. En el caso del crowdfunding las colaboraciones son monetarias y obtenemos financiación a través de pequeñas aportaciones de gente que simpatiza con nuestra idea; en el caso del crowdfunding la colaboración se realiza aportando trabajo, conocimientos, contenidos o, por ejemplo, nuestro tiempo y nuestros recursos tecnológicos.
Pues sí, además de contribuir con nuestro know-how a un proyecto que se lanza a la búsqueda de colaboradores a través del crowdsourcing, es posible contribuir a estos proyectos con algo tan simple como ceder la CPU de nuestro smartphone o nuestra tableta, compartir nuestra posición, compartir la ruta que hemos hecho mientras estábamos de paseo o subir una foto de nuestra ciudad. Actos simples y cotidianos que pueden contribuir a construir un mapa mundial con la cobertura de telefonía móvil y de redes Wi-Fi, ayudar a la investigación científica o hacer que Wikipedia ofrezca aún más contenidos.
¿Y cómo es posible que podamos hacer todo esto? Aunque nos pueda parecer complejo, contribuir con todos estos proyectos es mucho más sencillo de lo que, quizás, nos podríamos imaginar y, realmente, es algo que podemos hacer desde la "palma de nuestra mano" con nuestro smartphone y alguna aplicación.
Para demostrar que aportar nuestro granito de arena a este tipo de proyectos e iniciativas es fácil, vamos a dedicar unos minutos a conocer algunas aplicaciones móviles para colaborar en proyectos de crowdsourcing sin que esto nos suponga una gran esfuerzo o dedicación:
Colaborar con investigaciones científicas
Seguramente, muchos recordarán el proyecto SETI@home de la Universidad de Berkeley; un proyecto de investigación científica que se apoyaba en la computación distribuida para construir un "gran computador" en base a los ciclos de CPU que muchos usuarios cedían de sus ordenadores personales (cuando estos estaban ociosos, por ejemplo con el protector de pantalla). SETI@home evolucionó en una plataforma llamada BOINC (Berkeley Open Infrastructure for Network Computing) para concentrar todos estos "ciclos de CPU" que la gente aportaba voluntariamente y distribuirlos entre múltiples proyectos de investigación que requerían la realización de cálculos de alta complejidad computacional.
Hoy en día nuestros smartphones tienen gran capacidad de proceso que, en determinados momentos, no se aprovecha al 100% y, precisamente, aquí es donde entra BOINC para Android. Gracias a esta aplicación gratuita podremos contribuir con proyectos de investigación desarrollados en la Universidad de Berkeley aportando la capacidad de proceso de nuestro teléfono móvil.
Para hacer que nuestro smartphone forme parte del grid de recursos de BOINC, lo único que tenemos que hacer es instalar la aplicación en nuestro terminal y, tras iniciarla, seleccionar el proyecto con el que queremos colaborar. A partir de ahí, la aplicación funcionará en segundo plano y solamente se pondrá a trabajar si la batería del terminal está por encima del 90% y estamos conectados a una red Wi-Fi para no penalizar ni nuestra autonomía ni tampoco nuestro bono de datos.
Colaborar con OpenStreetMap
OpenStreetMap es un proyecto colaborativo que tiene como objetivo desarrollar un sistema de mapas totalmente libre y abierto. Esta alternativa libre a Google Maps, que por ejemplo han adoptado servicios como Foursquare, se construye gracias a la colaboración de miles de personas de todo el mundo, empresas y entidades públicas que aportan cartografías, mapas y correcciones para hacer que este sistema saca cada vez más completo y aporte información de calidad a los usuarios.
¿Y cómo podemos colaborar con OpenStreetMap? Si disponemos de un terminal Android y nos gusta salir a pasear, gracias a OSMTracker for Android podremos aprovechar nuestros paseos para realizar anotaciones o aportar correcciones a OpenStreetMap. Nuestro smartphone dispone de GPS y mientras vamos paseando podemos localizar las coordenadas de la ruta que hemos seguido y realizar anotaciones de puntos de interés, dirección de la circulación de las calles por las que pasamos, adjuntar fotos o notas escritas o de voz.
Una vez que terminemos nuestra ruta, el archivo GPX
que se genere puede llevarse a OpenStreetMap con las herramientas que esta comunidad pone a nuestra disposición y así podremos dar nuestra aportación al proyecto.
Crear un mapa con la cobertura móvil de los operadores
Hoy en día son muchos los operadores que están publicando mapas con la cobertura que ofrecen en los países en los que prestan servicios; si bien parece que apuestan por la transparencia, creo que la opinión y percepción que más nos interesa es aquella que proviene de los propios usuarios de primera mano. Con la idea de crear un gran mapa de cobertura móvil y también de cobertura Wi-Fi nació el proyecto OpenSignal.
Este proyecto se fundamenta en el crowdsourcing y convierte a nuestros dispositivos móviles en sondas de medida que sirven para realizar mediciones de cobertura y de la calidad de servicio que percibimos, por ejemplo, al realizar una pequeña descarga de prueba. Todos estos datos, sumados a los de redes Wi-Fi abiertas, forman una gran base de datos mundial en la que podremos encontrar información de 824.297 estaciones base, 825 operadores de todo el mundo, más de 5 millones de medidas realizadas por los usuarios y más de 1.200 millones de redes Wi-Fi catalogadas que nos servirán para hacernos una idea de la cobertura o el servicio disponible en casi cualquier rincón del planeta.
Colaborar con el proyecto, cuyos datos podemos consultar desde su web sin necesidad de registro, es muy sencillo y solamente tendremos que descargar la aplicación disponible para iOS o la aplicación Android.
Trasformar nuestro smartphone en una "estación meteorológica"
Si bien es cierto que existen un buen número de aplicaciones móviles con las que obtener información meteorológica, en muchos casos la información que recibimos es compleja y realmente con algo mucho más simple y directo nos podemos conformar.
¿Hace buen tiempo? ¿Hace demasiado calor? ¿Hace mucho frío? Son las preguntas típicas que uno se plantea antes de hacer un viaje y que, realmente, nos respondemos al interpretar los datos de temperatura, viento o el pronóstico de lluvias. Gracias a Weddar, una aplicación para iOS gratuita, este tipo de preguntas se responderán gracias a las aportaciones de otros usuarios del servicio.
Mediante el crodwsourcing, Weddar plantea a los usuarios una serie de "descripciones sencillas" que definen el tiempo de su localidad; un dato que pueden subir al servicio y así aportar cómo está el tiempo en su zona de manera sencilla y, sobre todo, muy visual.
Traducir textos y aprender idiomas
Luis Von Ahn que, entre otras cosas, es el creador del captcha es un profesor de ciencias de la computación de la Universidad Carnegie Mellon que ha ideado un servicio, llamado Duolingo, que facilita a los usuarios una plataforma en la que pueden aprender idiomas de manera gratuita y sin tampoco introducir publicidad, solamente tendremos que aportar nuestro trabajo.
Con un modelo muy singular, Duolingo nos propone textos en inglés que debemos traducir al español, al francés, al italiano, al alemán o al portugués o viceversa; unos textos que no son casuales puesto que las frases a traducir proceden de páginas webs que requieren ser traducidas para que los contenidos estén accesibles a mucha más gente.
Un buen ejemplo de crowdsourcing en el que la colaboración se ve recompensada con el aprendizaje y perfeccionamiento de otros idiomas distintos al nuestro; un esfuerzo que además sirve para hacer la web más universal y llevar textos, por ejemplo, de la versión inglesa de Wikipedia a la versión en español.
Duolingo está disponible en forma de plataforma web y, también, en forma de aplicación iOS y aplicación para dispositivos Android.
Colaborar con el banco de imágenes de Wikipedia
Creo que sobra explicar qué es Wikipedia y que el proyecto se sustenta, precisamente, en el crodwsourcing; es decir, en la colaboración voluntaria de millones de personas de todo el mundo. Además de los textos que forman parte de Wikipedia, las imágenes son también contenidos que tienen gran peso y que tienen un doble papel: ilustrar los artículos de Wikipedia y, por supuesto, servir de banco de imágenes para muchas webs que usan este material respetando la licencia Creative Commons bajo la que se publican estos contenidos.
Las cámaras de fotos de nuestros smartphones nos han hecho muy fácil tomar una foto y compartirla a través de Internet; un gesto sencillo que también puede canalizarse hacia una colaboración con Wikimedia Commons (el banco de imágenes de Wikipedia).
Wikimedia Commons está disponible en forma de aplicación iOS y también en forma de aplicación Android y su uso es extremadamente sencillo: tomar fotos mientras hacemos turismo o vamos por la calle, asignarles un título, una descripción y una categoría y "donarlas" a Wikipedia, así de simple.