Unos meses antes de que se produjese el evento de presentación de PlayStation 4, en el que se vio por primera vez el nuevo DualShock, surgió un rumor que aseguraba que esta consola tendría un mando divisible. Finalmente no fue así, pero una pequeña empresa llamada Mad Genius Controllers ha creado un prototipo de un controlador parecido que podría llegar al mercado gracias a Kickstarter.
Lo mejor de este mando divisible es que no necesita que el juego haya sido creado con este controlador en mente, sino que reinterpreta los movimientos del usuario y los convierte en acciones del juego. El título elegido para mostrar las capacidades del periférico fue Skyrim, que permite, por ejemplo, disparar con un arco o atacar con una espada.
De este modo, al comenzar la partida el mando está unido y se puede usar para mover al personaje. Para hacerlo únicamente hay que desplazarse hacia adelante o hacia un lado. Sin embargo, si se separa y se sostiene cada una de las mitades como si se estuviese usando un arco, irá al menú de favoritos y hará que el personaje saque este arma.
Esto lo consigue gracias a que el sistema de captura de movimiento sabe en todo momento dónde está el mando en la habitación. Y esto se logra sin la necesidad de cámaras o sensores externos (es decir, más allá de los que se incluyen en el propio mando). Por lo tanto, aunque en el vídeo se vea un ordenador, éste únicamente aparece para mostrar el rastreo de movimiento, pero no es necesaria su presencia. Todos los cálculos los realizan unos procesadores, el cerebro de este sistema que, en un futuro, será inalámbrico.
A pesar de ello, tiene un margen de error de una centésima parte de una pulgada, según aseguran sus creadores. Por lo tanto, es posible usar el mencionado arco con absoluta precisión. De hecho, recomiendan aguantar la respiración para aumentar las posibilidades de éxito.
Por el momento, el mando divisible es un prototipo creado para ver "qué es posible", en palabras de Mad Genius Controllers. Además, creen que este vídeo les ayudará a conseguir el interés necesario antes de lanzar una campaña de financiación en Kickstarter. Esto hace que se conozcan pocos detalles del funcionamiento del controlador, más allá de que crea unos cubos virtuales con los que conoce en todo momento la localización de cada parte del mando. Tampoco se sabe cuánto costará, aunque sí parece seguro que será compatible con cualquier consola y juego, ya que no realiza cambios en el hardware ni el software.