Legislaciones como la francesa HADOPI, la Ley Sinde en España o la afortunadamente fallida SOPA estadounidense nos han demostrado cómo las presiones de la industria de los contenidos (productoras, discográficas, etc) pueden materializarse en legislaciones a medida que buscan el proteccionismo de un modelo de negocio algo arcaico. Uno de los argumentos que siempre se ha utilizado como estandarte es que, en pleno siglo XXI, Internet más que un enemigo puede ser un aliado para la industria de los contenidos y puede contribuir a la distribución de canciones o películas si éstas se distribuyen a un precio razonable. Servicios como Netflix o Spotify han aprovechado la red a su favor y gozan del favor de un buen número de usuarios, una oferta de servicios y contenidos que no siempre podemos encontrar en España a un precio igual de atractivo. Algunas plataformas de televisión de pago ofrecen servicios de vídeo bajo demanda dentro de su oferta de servicios y, por ejemplo, Canal+ estaba ofreciendo YOMVI en el que se podían ver películas, documentales, series de TV y partidos de fútbol; un servicio que, según se ha anunciado hoy, estará disponible fuera de esta plataforma digital a través de un acuerdo con CINESA.
La idea, en el fondo, pueda parecer más o menos similar a otras alternativas del mercado aunque el precio sí que puede ser un factor a tener en cuenta puesto que existe la posibilidad de abonarse por 7,95 €/mes + IVA, es decir, 9,62 € y tener acceso, durante un mes y sin permanencia, a películas, series, documentales y acceso al canal CANAL+2 a través de Internet. Los aficionados al fútbol (entre los que no me encuentro) podrán abonarse por 18 € al mes a los partidos de la Liga de Campeones y 8 partidos por cada jornada de Liga y, en el caso de no desear abonarse, pagar únicamente por los contenidos que se consuman (de entre los 2.000 títulos que anuncian tener en catálogo, según comentan, tiempo antes que otras plataformas similares). De esta forma, el usuario de CINESA podrá ver los últimos estrenos que no haya disfrutado en las salas de cine y, a diferencia de otros servicios, complementar su oferta de ocio con el mejor fútbol.
El servicio estará disponible a partir del 15 de noviembre y, por ahora, solamente será accesible desde la web de CINESA (habrá que visualizar los contenidos a través del navegador) aunque, quizás, con el tiempo (al igual que ocurre con otros servicios) se lancen clientes para plataformas móviles. Como suele ocurrir en estos casos, a primera vista la oferta no parece estar nada mal y, en el caso del acceso a películas, documentales y series, el precio es bastante competitivo (si tenemos en cuenta algunos precios de alquileres que se manejan en plataformas existentes en la red o en servicios de televisión de pago) aunque, la verdad, habiendo visto el desempeño de otros servicios (y los que no han llegado a implantarse en España como Netflix) más vale ser cauto con el nivel de expectativas que se tiene.
Por ahora, además del anuncio, las modalidades de suscripción y el precio, poco más se sabe puesto que en la web de CINESA (que por cierto es una distribuidora de películas) lo único que podemos encontrar es un servicio de newsletter en el que apuntarnos para recibir novedades sobre la plataforma o cómo suscribirse a ésta puesto que se deduce que el acceso a YOMVI se realizará desde esta web.
El lanzamiento de YOMVI de manera desacoplada a Canal+, en mi opinión, es una buena forma de fomentar el acceso a la oferta de contenidos de Canal+ sin necesidad de abonarse a un paquete de múltiples canales, diversificando la cartera de clientes y, precisamente, entrando en un campo (la oferta de servicios a través de la red) en el que hay mucho que explorar y en el que, realmente, se puede llegar a un modelo de servicios en el que oferta y demanda lleguen a un buen entendimiento.