A picture taken on December 3, 2010 in Paris shows a page of the website WikiLeaks featuring its founder Julian Assange. The noose tightened around WikiLeaks as cyber attacks temporarily forced the whistleblowing website off the Internet and its elusive founder Assange faced a fresh arrest warrant. AFP PHOTO THOMAS COEX

Julian Assange, fundador de WikiLeaks, se encuentra desde hace algo más de un mes en la Embajada de Ecuador en Londres, donde ha pedido formalmente asilo político a Ecuador (y donde su madre se ha trasladado para facilitar los trámites y se ha entrevistado con el Ministro de Asuntos Exteriores). Si bien para encarar el proceso al que se enfrenta en Suecia contará con el ex-juez Baltasar Garzón para dirigir al equipo de abogados que lo defiende, con la idea de evitar la extradición a Suecia, Ecuador le ha solicitado a Suecia que el interrogatorio de Assange sea realizado en su embajada y, por tanto, no sea necesario que el fundador de WikiLeaks sea traslado a este país.

Tras la negativa de Assange a presentarse ante la policía de Reino Unido para preparar la extradición a Suecia y el refugio en la embajada de Ecuador, el Ministro de Asuntos Exteriores de Ecuador, Ricardo Patiño, ha anunciado que ha dado las órdenes pertinentes a su embajador en Suecia para que establezca contactos con el gobierno de dicho país con la idea de buscar un acuerdo que permita que Assange pueda testificar sin necesidad de salir de la Embajada de Ecuador en Londres.

Nuestro embajador en Suecia ha iniciado contactos y trámites para solicitar al Estado sueco que las declaraciones y testimonios que el señor Assange tenga que hacer se realicen donde se encuentra actualmente, es decir, la Embajada de Ecuador en Londres. [...] Esta es la petición que hemos realizado dentro de todo lo que está en nuestra mano para así proteger la vida del señor Assange.

Según ha revelado el propio Assange en más de una ocasión, la extradición a Suecia podría ser el primer paso de una eventual extradición a Estados Unidos donde se le reclama por la publicación de los documentos secretos del Departamento de Estado (el conocido como Cablegate) y por el cual podría enfrentarse, incluso, a la pena capital. Lógicamente, el papel de Ecuador es determinante en este proceso porque la acogida en la embajada y, si se aprobase, la concesión del asilo político podría salvaguardar la posición de Assange.

Sobre el asilo político y su concesión, por ahora, no se conoce mucha más información y, por ahora, el gobierno de Ecuador mantiene su postura oficial en la que indica que comunicará su decisión cuando terminen los Juegos Olímpicos de Londres, es decir, a partir del 12 de agosto.

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