**Los excedentes siempre han sido un problema en la industria de la música**. Volvamos atrás en el tiempo cuando las compañías disqueras tenían que pagar [**payola**](https://secure.wikimedia.org/wikipedia/es/wiki/Payola) antes a las estaciones de radio para que programaran su material, ya que existía más música de la que la que se podía transmitir. Esta práctica fue declarada ilegal en los años 60, sin embargo, las disqueras continúaron *promoviendo* su música para tener el control de las listas de popularidad. De acuerdo al estudio que hoy nos ocupa titulado **Bye, Bye, Miss American Pie?, la oferta de música nueva desde Napster**, para 1985 el monto invertido en *tiempo aire* fue de casi 65 millones con una ganancia neta, después de impuestos, de 200 millones de doláres. **Excesivo.**

Hoy en día el problema es similar de acuerdo al profesor **Joel Waldfogel**, investigador del Comité de Impacto de Políticas de Copyright en la Innovación de la Academia Nacional de Ciencias en EE.UU., encargado de esta investigación: **hay un excedente en la producción de música**, en otras palabras, hay **más música que nunca antes en la historia**, además de que para descubrirla (y promocionarla) no solamente existe el radio, tenemos a YouTube, radio en internet, Last.fm, Itunes, Spotify y una vía responsable en gran medida del éxito o fracaso de nuevo material musical: **los blogs especializados en crítica músical** como Pitchfork y Metacritic.

La premisa de este estudio es que [todo cambió desde Napster](http://alt1040.com/tag/napster) y por esta razón el investigador hizó una comparación de la cantidad de álbums producidos desde que surgió el épico sitio de intercambio de música considerando la situación, tendencias y posible control (estilo payola) en el volúmen de nueva música desde que Itunes *revitalizó* el sencillo, encontrando así que:

No encontramos evidencia de que desde Napster se haya afectado la cantidad de nueva música o artistas en el mercado

La industria alega constantemente que el *copyright* es un incentivo para la creatividad, sin embargo, como muchos ya sabemos el estudio reafirma una vez más que además de que los monopolios son malos por donde se le quiera ver:

El monopolio creado por el copyright se usa como justificación para alentar la creación de nuevas obras, pero hay poca evidencia de que exista una relación.

Las excesivas acciones de industria discográfica en contra del *file-sharing* han provocado un debate a nivel político, cultural, económico que han tenido también efectos positivos como lo son la **participación ciudadana** para contrarrestar las políticas que impulsa la industria a nivel legislación, las **licencias libres** cada vez toman más fuerza, más músicos liberan su material gratuitamente y cada vez existen más estudios académicos que abordan el fenómeno más allá del mercantilismo y el pobre argumento del *copyright*.

La industria no solo ha fallado en la forma en la cual pretenden perpetuar, sin éxito, su modelo de negocio [criminalizando](http://alt1040.com/2011/02/reporte-de-propiedad-intelectual-2010-la-criminalizacion-como-modelo-de-negocio) la [**cultura milenaria y simplemente incontrolable de la copia**](http://www.hup.harvard.edu/features/boon/), también ha fallado en producir datos y argumentos que sustenten su esfuerzos para controlar la circulación de bienes culturales vía internet.

Durante los 3 últimos meses ha incrementado la publicación — o por lo menos la visibilidad — de los estudios académicos que abordan el fenómeno del *file-sharing* utilizando nuevas variables que dejan claro que es imposible abordar este tema desde una perspectiva de *ventas pérdidas*, como la que consideran los estudios — [de dudosa metodología](http://alt1040.com/2011/01/la-realidad-segun-el-reporte-de-musica-digital-2011) — que publica anualmente la industria discográfica.

El estudio *Bye Bye Bye, Miss American Pie?* introduce los factores de la **crítica musical y las tradicionales listas de popularidad** que sitios como Pitchfork han publicado desde hace años (como lo hacia antes la radio) para demostrar que no es el *file-sharing* sino la tecnología, lo que ha debilitado la protección de la música por medio del derecho de autor.

La investigación utiliza el hábito de la audiencia profesional y amateur de generar ratings y los rankings de música para calcular la **relación entre las ventas y el reconocimiento público** y el resultado es que los álbums que mejores críticas recibieron fueron también los que más vendieron (al menos medio milón de copias).

Los monopolios culturales tendrán que entender en algún momento que cantar no es suficiente para vender, el talento no se fabrica y el internet permite a los artistas competir realmente por una audiencia, a pesar de los millones de doláres que grandes compañías deciden invertir en promoción, videos y propaganda para lanzar a un artista, siempre existirá el riesgo de que carezcan de talento, lo cual es frecuente en las industria de la música. **Mucha promoción poco talento es igual a pocas ventas,** no se diga descargas.

La realidad de poder **producir profesionalmente música a bajo costo es irreversible.** Pero jamás hemos visto que la industria quiera crear una ley para prohibir el Ipod o demandar a Pro Tools por ofrecer herramientas profesionales de bajo costo ¿cierto?. No, porque todos nos beneficiamos de la tecnología, y la música, es quizá uno de los que más lo hacen, ahí tenemos a Spotify. Más obviedades: al parecer el ingreso financiero vía conciertos ha incrementado, y no es una sorpresa, la gente esta dispuesta a pagar por **experimentar** la música en vivo.

Así como la tecnología democratizó la producción y distribución musical, logrando que los intermediarios ya no sean necesarios, un efecto colateral de esta absurda guerra contra el *file-sharing* también es la **democratización de la producción, distribución y acceso de estudios académicos** que permiten que la sociedad conozca argumentos fundamentados para poder formar un criterio informado acerca de la situación, y no dejarse llevar por los *chayotes* (payola periodística) que publican los periódicos acerca de la *piratería* o la propaganda en medios masivos de comunicación tradicionales.

En **ALT1040** hemos analizado los estudio más recientes acerca de copyright y descargas de la [Escuela de Economía de Londres](http://alt1040.com/2011/03/por-enesima-vez-¡las-descargas-no-estan-matando-a-la-industria-musical) y el de [Piratería de contenidos en Economías Emergentes](http://alt1040.com/tag/media-piracy-emerging-economies), los cuales valen la pena consultar para estar al tanto de este interesante movimiento de investigación académica en torno al intercambio de archivos, también llamado *file-sharing*, o como prefiere la industria: **piratería.**

La conclusión del estudio es que:

El file-sharing presenta un gran reto para la industria discográfica. Es claro para la mayoría de los observadores que el file-sharing ha debilitado la efectividad de la protección de copyright que ofrece la industria discográfica. A pesar de esto, la oferta de música indica que no ha decaído mucho desde Napster, y hay al menos evidencia que sugiere que los sellos independientes, que operan con marcos de ganacia menores, estan jugando un papel más grande para traer nuevas obras al mercado

Así como el negocio industrial de la música ha perdido su relevancia debido a su incapacidad de adaptarse al mercado, [sus estudios](http://alt1040.com/2011/01/la-realidad-segun-el-reporte-de-musica-digital-2011) también están sufriendo el mismo efecto, al negarse a la compresión del fenómeno desde una perspectiva donde el dinero y las pérdidas no son la única variable.

Puedes descargar gratuitamente este estudio del sitio del [Buró Nacional de Investigación Económica]( http://www.nber.org/papers/w16882) para ver las tablas y analizar la metódología con más detenimiento.

Dice Nortec, que **el download es cultura®**.

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9 Comentarios

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  1. Por un lado las disqueras cuidan mucho su flujo de efevo. a través del cobro a los músicos y venta de CD’s etc, opciones virtuales llegan a desbancar el uso de las disqueras y otros entes que son devoradoras de las economías.

    El tema de hacer música es una parte artística en muchos sentidos, pero también lo es el generador de dinero y fama que posiblemente se pierda al ingresar a la red… artistas tendrían que pagar a despachos para que compartieran su música y hubiera de nuevo una industría que los beneficiaría directamente…

    Esfuerzos como el software de http://www.all.com buscan terminar con esta brecha, pero también inicia una nueva… entonces el camino es incierto como siempre.

    Es como entrar a laborar a una empresa como empleado… o ser un consultor independiente, free-lance, etc @thelibrezone en estos casos puedes vivir lo que pasaría a un músico que se lanzara solo con las redes y sin disqueras… eso sí… posiblemente habría más artistas y más arte.

  2. Esta clar oque la industria musical poco a poco tiene que ir dando pasos hacia el nuevo sistema de marcado que parece que va a tener en un futuro si o si.

    Pero no podemos esperar que sea de hoy a mañana, para conseguir esos pasos se necesitan calzadas como loson Spotify, Last.fm y lo que fue en su momento Napster.

    Tiempo al tiempo, y mientras tanto nosotros no rendirnos en lo que es legal o no.

  3. Creo que en este debate y principalmente ALT1040 esta tomando este tema desde un enfoque equivocado.

    Las empresas trabajaron e hicieron su trabajo, dejemoslas de lado y dejemos que se queden con su trabajo (de muy muy baja calidad).

    Enfoquense en mirar a ver la alternativa y no a cambiar de mentalidad a los monopolios. Dejemoslos morir junto con sus artistas de plastico, papel y musica de quinceañeros.

    Denle importancia a la gente que hace su trabajo para compartirlo y no a los que lo hacen para sandrar nuestros bolsillos. El dia que entiendan esto, podran tambien dejar de lado toda la basura que nos venden en las tiendas y comprar solo las cosas que necesitamos.

  4. Sin duda alguna, el sector musical hace tiempo que está reviviendo, sólo tenemos que fijarnos en eventos como MIDEM o SXSW, que ponen en evidencia la magnitud de la transformación y los beneficios que guarda para los artistas. Lo que ocurre es que no logramos despegarnos de un modelo obsoleto y nos seguimos empeñando en querer vender un producto que carece de mercado. Hay que cambiar de concepto porque nada es como era, los beneficiados… todos a aquellos que entiendan que su mayor valor es el emprendimiento y la creatividad comercial, porque los cambios que se están produciendo en la industria musical son oportunidades, más que riesgos.

    1. El «sector musical» no esta, estuvo o estara muerto jamaz. Decir que esta «reviviendo» esta fuera de lugar. Pero bueno, mas bien entiendo que «la industria de la musica» es la que esta encontrado un nuevo modelo.

      1. Bueno Diego, son formas de expresión, hacía un uso metafórico de la palabra pero igual debería haber dicho aflorar o algo de ese palo, tienes razón.
        Saludos