Como cada año, la revista Fortune se lanza al listamiento compulsivo de las grandes potencias económicas, en esta ocasión aquellas que dice provocan mayor admiración. Podría disertar largo y tendido sobre lo incomprensible que me resulta la veneración ciega que muchos gustan profesar hacia ciertas corporaciones, pero lo dejaremos para otra ocasión. Simplemente apuntar que el fanatismo corporativo (especialmente pronunciado en el ámbito tecnológico) sólo beneficia a las propias compañías, que se aseguran un buen puñado de dólares anuales en sus balances gracias a quienes sin raciocinio están dispuestos a comprar todo cuanto presenten.
Pero echemos un vistazo al top ten de compañías más aclamadas según la prestigiosa publicación. No nos sorprende que cuatro de ellas sean de tipo tecnológico: Google, Apple, Microsoft y Amazon se hacen hueco entre aerolíneas, aseguradoras y empresas de alimentación, léase Berkshire Hathaway, Southwest Airlines, Procter & Gamble, Coca-Cola, FedEx y McDonald’s.
En primera posición, como durante los últimos cuatro años, Apple. Los de Cupertino han articulado una compañía que además de fabricar gadgets, sabe insuflarles cierta filosofía a través de diseño y funcionalidad. Millones de usuarios pendientes de su próximo movimiento, kilométricas colas a la recepción de cada nuevo producto, atestiguan el porqué de este reiterado número uno.
En segundo lugar encontramos a Google, ahora gran rival de la anterior en terreno smartphone con su propio sistema operativo móvil, Android, principal alternativa al iOS del señor Jobs. De buscador a una de las compañías más poderosas del planeta, así es esta segunda clasificada.
Amazon ocupa la séptima posición y Microsoft se encuentra novena, desplazada por su poca fortuna en el campo de los sistemas operativos móviles, pero manteniéndose entre las diez primeras gracias al excelente trabajo realizado con Windows 7. La buena salud de Xbox 360 en Estados Unidos también tendría algo que ver.
Otras tecnológicas (ya fuera del top 10) son IBM (12º) Cisco, Intel, eBat, Sony y Oracle. Se echan en falta algunas como Netflix y sobran otras como Goldman Sachs, inclusión muy ciritcada por TechCrunch, que no entiende (nosotros tampoco) qué pinta en el puesto 25 la empresa responsable de una de las más cruentas crisis financieras que se recuerdan.