Cuando hace aproximadamente un mes salió a la venta en Estados Unidos el iPhone 4 para la operadora Verizon volvió a despertar el fantasma del antennagate. La aparición de una nueva versión con tecnología CDMA y una antena rediseñada levantó la curiosidad por ver si el supuesto problema de recepción del modelo GSM seguía presente o se había solucionado, aunque la comparación no fuera estrictamente válida. Pronto saltaron a la palestra publicaciones como Consumer Reports o iLounge que afirmaban que persistían los problemas de recepción.
Lo cierto es que estamos hablando de temas muy complejos. El diseño de antenas y la propagación de ondas electromagnéticas dependen de un número extremadamente alto de variables, como muchos podemos comprobar en detalles cotidianos. Por ejemplo, cuando un canal de televisión en concreto deja de verse cada vez que llueve. O al tener que asomarnos por la ventana para poder hablar con suficiente cobertura. O cuando la recepción de señal Wi-Fi sube y baja sin causa aparente. En AnandTech son conocidos por realizar pruebas realmente exhaustivas y centrarse en los hechos. En el caso del iPhone 4 GSM comprobaron que dependiendo de la forma de sujetarlo se produce mayor o menor atenuación de la recepción en un grado más acusado que otros teléfonos. Lo que no estaba tan claro según sus pruebas era que esa atenuación tuviera un impacto real en el uso del terminal, ya que gracias a la mayor sensibilidad de la nueva antena afirmaban poder mantener conexiones de voz y datos en lugares donde el iPhone 3GS no lo conseguía.
Ahora han realizado las correspondientes pruebas con el iPhone 4 CDMA y han podido constatar que la atenuación de la recepción de señal ha quedado solucionada en el uso diario. Sólo consiguieron un descenso notable agarrando el teléfono con un death grip claramente excesivo con las dos manos cubriendo con fuerza las partes superior e inferior. Vamos, en una postura no muy cómoda ni para hablar ni para manejar el aparato. ¿qué ocurre entonces con los que afirman que ven una degradación excesiva de la señal? Es posible que ambas posiciones sean ciertas, y en determinadas condiciones el iPhone tenga problemas de recepción y en otras funcione impecablemente. O también es posible que alguien haya sucumbido a la tentación de publicar lo que han considerado que llamaría más la atención. Lo cierto es que millones de usuarios lo llevamos todos los días en el bolsillo y lo usamos sin problema, pero también se oyen voces de queja. Y que todos los teléfonos son sensibles a la forma de sujetarlos.