Empleados de Wintek, empresa proveedora de paneles táctiles, han enviado una carta a Steve Jobs pidiéndole ayuda en la resolución del conflicto que mantienen con el fabricante a raíz del envenenamiento sufrido en las líneas de producción del iPhone.

Los trabajadores de la planta de Suzhou se quejan de que aún sufren los efectos del uso de n-hexano entre Mayo de 2008 y Agosto de 2009. La carta, firmada por cinco empleados que afirman representar a sus compañeros, alega que los millonarios beneficios obtenidos por Wintek y Apple se han logrado a costa de "las vidas y la salud de los trabajadores".

La sustancia empezó a usarse en la limpieza de las pantallas para el iPhone por su velocidad de evaporación, más rápida que la del alcohol y que permitía acortar los plazos de fabricación de los paneles táctiles. Una vez se detectaron los efectos nocivos en la salud de los trabajadores se descartó el n-hexano y se recuperó el uso del alcohol.

El reciente informe sobre los proveedores de Apple mencionaba este caso de intoxicaciones que obligaron a hospitalizar a 137 trabajadores. Según Wintek todos se recuperaron, pero se han producido quejas por la escasa compensación ofrecida. Los empleados afirman que aún sufren secuelas y no pueden hacer frente a los gastos médicos. Por ello piden a Apple que se presione a su proveedor para que asuma la responsabilidad que le corresponde.

Los síntomas de la intoxicación por n-hexano incluyen sudoración en pies y manos, repentino entumecimiento de las manos, hinchazón y dolor en los pies, cansancio y desmayos. Un empleado afirma que lo único que pueden hacer es permanecer en su puesto de trabajo y esperar que Wintek haga lo correcto.

Es una lástima que los trabajadores chinos no hayan podido obtener una respuesta decente por parte de sus superiores, y que hayan tenido que recurrir a presiones externas. No estamos hablando de unos accidentes laborales comunes, sino que fue la propia empresa la que puso su salud en peligro. Aunque Apple no tenga responsabilidad directa en este asunto no puede negar que tiene una cierta responsabilidad moral. Una empresa que se enorgullece de mantener los más altos estándares en cuanto a responsabilidad social y ambiental no puede permitir que sus proveedores directos caigan tan bajo. Y si no ¿para qué sirven los informes y los códigos de conducta para proveedores?