El periódico de Oslo, Aftenposten, ha soltado la última bomba informativa de WikiLeaks. Los cables se refieren a los acontecimientos ocurridos en el año 2007, momento en el que da comienzo la situación actual. China lanzó un misil con base en el centro espacial de Xichang (Sechuan), destruyendo un satélite de Estados Unidos y violando los acuerdos internacionales. Fue la primera y clara amenaza del poder chino que tenía como objetivo un satélite y que exponía de manera evidente que la carrera por el espacio militar había comenzado.
Tal y como cuentan en el diario, la importancia de los satélites es fundamental, ya que son la base de la vigilancia, la navegación y la comunicación actual en materia de desarrollo militar. Estados Unidos o la OTAN utilizan sus sistemas de armamento de alta tecnología y los misiles o los sistemas de comunicación en base a los satélites, son dependientes totalmente. Aunque en su momento los chinos llegaron a afirmar que se trataba de un error y su propósito era pacífico, ahora se revela todo lo contrario.
Los nuevos cables van más allá y revelan los siguientes documentos secretos de Estados Unidos, donde se pone de manifiesto el grado de preocupación ante una nueva carrera de armamento en el espacio militar. Tres puntos marcan las pautas de las pesquisas:
China llevo a cabo por lo menos tres ataques más con misiles secretos dirigidos a los satélites en el espacio, dando por "cerrado" los acuerdos internacionales.
Estados Unidos ha tenido que cambiar el rumbo de varios de sus satélites para evitar la colisión.
La Estación Espacial Internacional (ISS) tuvo que maniobrar lejos para evitar el riesgo de ser afectados por los residuos de las pruebas nucleares chinas.
En palabras de Stale Ulriksen, del Instituto de Política Exterior NUPI (Noruega), al diario:
Si alguien lleva a cabo alguna acción contra los satélites, todo el concepto militar occidental se puede colapsar. Los Estados Unidos y la OTAN perderían su poderío militar
Así las cosas, en estos momentos existe un cruce de acusaciones entre China y Estados Unidos. Por parte estadounidense, critican duramente las acciones de China y se muestran alarmados por las empresas emergentes chinas en el espacio ultraterrestre, especialmente las que denominan en los informes como las pertenecientes al proyecto 'Star Wars'. En el caso chino, el país se muestra reacio y rechaza y critica abiertamente a Estados Unidos. Podemos decir que antes del cable sobre Bank Of América, ya tenemos la primera "bomba" del año.