Leyendo Segu-Info me entero de la nueva creación, Open Source, sobre *un nuevo sistema de seguridad mediante Captcha al que, básicamente, se le añade movimiento a las imágenes que lo componen.
Los códigos Captcha*, aunque en algún caso necesarios para evitar ciertos bots, en la mayoría de los casos se convierten en el peor enemigo de la usabilidad web y en la más horrible pesadilla de cualquier usuario. Muchas veces irreconocibles e ilegibles y otras veces lentos hacen insufrible el tener que acceder, algunas veces, a cierta información.
Sin entrar en la necesidad, o no, de utilizar sistemas de seguridad que alejen a las arañas automáticas creo que cualquier servicio que quiera ofrecer calidad a sus clientes y gozar de buena reputación tenderá a la eliminación de éstos códigos y la sustitución por otros métodos. En mi experiencia personal, la única vez que me he tenido que enfrentar a códigos Captcha móviles (que yo recuerde) ha sido en un portal de almacén de archivos (del estilo megaupload y actualmente no recuerdo ni el nombre.
A pesar de que los desarrollos en éste sentido están algo verdes y que la diferenciación entre usuario y máquina cada vez sean más difíciles, una buena seguridad y una experiencia agradable al usuario no deberían sustituir un servicio eficiente.
Por escudarse en visitas de bots, arañas, indexadores de contenido y demás automatismos de la red, una página web no debería poner trabas a los usuarios los que, al final, son quienes encuentran dificultad para descifrar tanto criptograma. Una buena web, con un servicio sencillo y accesible creará un valor añadido que, a la larga, se puede convertir en el mejor aliado de una web o portal.
Seguro que hay veces que es necesario éste tipo de sistemas de seguridad pero seguro que más de uno coincidirá conmigo en que, en la mayoría de los casos, sobran.