Lenta, pero impasiblemente, la forma en la que accedemos a la red está cambiando. Nuestros hábitos y costumbres en la forma de conectarnos, dónde nos conectamos, cuándo nos conectamos, todo está cambiando y los números no hacen más que refutar esto. Hoy me he enterado de que iOS es la tercera plataforma mundial de acceso a internet, pero no la tercera plataforma móvil, no, de todas. Únicamente están por delante suya Windows y Mac OS X ya que, sorprendentemente, superó a linux el pasado mes de julio y si no, mirad esta gráfica:
Ayer, Jerónimo nos contó que Android había acortado distancias con iOS en cuanto a las plataformas móviles, pero si comparamos ambos con las plataformas "de escritorio", los dos, iOS y Android están subiendo y, sobre todo este último, a una velocidad de vértigo. ¿Qué significa esto? Que nuestros hábitos están cambiando: ya no esperamos a llegar a casa para conectarnos y leer el correo, ahora leemos el correo cuando nos llega, estemos donde estemos; ya no usamos los sms para mandarnos mensajes, usamos los privados de Twitter; ya no leemos los feeds por la noche después de trabajar, los leemos en el bus o en el metro, de camino al trabajo o de camino a casa; y así podría continuar con muchas cosas que antes hacíamos en el ordenador y que ahora hacemos en nuestro móvil o nuestro tablet, cosas que poco a poco y sin darnos cuenta hemos cambiado.
La cosa está clara: Internet se mueve, se hace móvil, sale de nuestras casas y nos llega directamente al teléfono y el crecimiento del uso de internet desde dispositivos móviles, con iOS o Android a la cabeza, realmente da igual, va a aumentar y los grandes "perjudicados" van a ser los sistemas de escritorio, que mes tras mes van a ver como sus estadísticas van a ir cayendo, poco a poco, pero con constancia. ¿Llegará algún día en que la gente acceda a internet más a través de sus teléfono que de sus ordenadores? Yo no me atrevería a aventurar nada, salvo que todavía queda algún tiempo para que eso ocurra, si es que ocurre.
Aunque todo esto, no significa, ni mucho menos, que los ordenadores vayan a desaparecer o que vayan a ser piezas de museo (al menos eso quiero pensar), pero sí que vamos a ver como los fabricantes miman más a sus móviles que a sus ordenadores y, por mucho que Apple lo niegue, es algo que ya estamos sufriendo los maqueros. Poniéndonos en lo peor (o lo que yo considero lo peor), me imagino un futuro en el que los ordenadores serán herramientas para los profesionales, como los kit de desarrollo para las consolas, y se usarán única y exclusivamente para desarrollar aplicaciones para los móviles y los tablets, que se usarán como ahora los ordenadores personales. Espero que esto no pase.
Y vosotros, ¿habéis cambiando vuestros hábitos?, ¿qué hacéis ahora en el móvil que antes hacíais en el ordenador?, ¿cómo pensáis que será el futuro?