La SGAE ingresó el año casi 28 millones de euros por el canon digital, lo que hace un 72.6% más que el año anterior. Mientras que los ingresos por venta en formatos físicos fueron de más de 20 millones de euros, un 30.5% menos que el del año pasado.

Para la Sociedad General de Autores la venta de discos piratas y descargas ilegales siguen siendo demoledores para las ventas de discos. A pesar de dicha caída este año la SGAE ha tenido unos ingresos de 317 millones, solo un 5.1% menos que el año anterior. Algo que teniendo en cuenta los tiempos de crisis que vivimos, esta bastante bien.

Pero en todos estos datos, hay que tener en cuenta los datos que no cuentan para algunos. Aquí no se habla de la venta de música digital o de lo que las empresas gestoras, discográficas y autores ingresan por estos servicios.

Son datos que no se deberían dejar de contar, por que es una forma de falsear los datos que nos están dando, haciendo creer que esa perdida de ventas en formatos físicos es completamente culpa de la piratería. Cuando lo que sucede desde hace un tiempo es que cada vez son más las personas que compran música en servicios digitales como iTunes o prefiere usar sus canciones favoritas en Spotify, donde ellos también sacan beneficio.

Teniendo en cuenta esto, las ventas declaradas por la SGAE y la compensación que se hace con el canon digital, deberían estar más que contentos. Quizá me equivoque en mi forma de ver las cosas, pero si por un lado ingresan un 70% más y por otro lado dejan de ingresar un 30%, esta claro que les compensa lo suficiente como para dejar de utilizar determinadas tácticas.

Con esto no quiero decir que me parezca bien el canon digital ni que me conforme, en absoluto. Si en mi mano estuviera lo prohibiría desde ya, pero siempre resulta curioso ver como la SGAE -y demás asociaciones de ese tipo-, siguen empeñadas en querer criminalizar día si y día también a los internautas y las descargas ilegales.

Sentencia tras sentencia vemos como webs de enlaces son declaradas legales, pero la SGAE y las discográficas no aprenden, no por que no puedan, si no por que más bien, no quieren. Con el actual modelo, ellos son los que más ganan, por encima de los músicos, si pueden hacer que todo siga igual, o incluso puedan ganar más, mucho mejor, que se tienen que encargar de dar de comer a los artistas.

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