Foto por W. Liller

El Cometa Halley fue una de las primeras razones por las cuales empecé a observar el cielo. Todos los días, en 1986, nos levantábamos en la madrugada en una playa en Ecuador (en esa época muy tranquila, ahora no tanto) para intentar tener alguna noción del cometa Halley atravesando el cielo.

Solo logramos ver algo un día y a mis 6 años era todo un poco pesado y por momentos aburrido. Pero a cambio mi curiosidad por el cielo, la astronomía y la ciencia en general despertó.

Recibe cada mañana nuestra newsletter. Una guía para entender lo que importa en relación con la tecnología, la ciencia y la cultura digital.

Procesando...
¡Listo! Ya estás suscrito

También en Hipertextual: