RIAA

A mediados del año pasado les estuve comentando sobre uno de esos casos donde los representantes de las discográficas, la RIAA para ser exactos, enjuiciaban a una mujer, llamada Jammie Thomas-Rasset, y que según ellos, debería pagar 1.92 millones de dólares por haber descargado 24 canciones a través del Kazaa.

La cantidad de dinero nos dejó a todos impresionados (e incluso causaba gracia) y el juez Michael Davis y el jurado también pensaron que esto era una verdadera locura y por eso redujeron la multa a US$54 mil (si me preguntan también me parece exagerada).

¿Dónde va este dinero? Obviamente no a los artistas. Jonathan Lamy, vocero de la RIAA, anunció que estos fondos que se recuperarán se reinvertirán en educar y hacer nuevos programas antipiratería.

Jammie tendrá que esperar 7 días para ver si la RIAA quiere realizar nuevamente el juicio porque no le gustó la resolución y después de eso, si todo está como hasta ahora, encontrar la forma de pagar esos US$54 mil.