Las compañías discográficas son algo bastante complicado. Por un lado están castigando a los "piratas" con todas sus fuerzas y, en muchos casos, los "piratas" no son más que ellos ya que en ocasiones realizan mixtapes que venden pero sin tener el derecho de algunas canciones que forman parte de estos compilados.
Muchas veces se supo de artistas que le hicieron juicio a determinados sellos por realizar esta práctica y al parecer esta vez comenzaron a movilizarse. Un grupo de músicos completaron una demanda contra los sellos que están conectados con la CRIA, que es básicamente la RIAA pero de Canadá.
Este juicio ya viene realizándose hace un tiempo y multinacionales como Warner Music, Sony BMG Music, EMI Music y Universal Music están en la lista de los que deberán pagar, por ahora, US$50 millones, aunque podría llegar a extenderse hasta los 6 mil millones.
Parece que hay que mirar un poco más cerca de sus narices antes de tratar de atrapar a los que los verdaderos piratas llaman "piratas" (y que no generan dinero con ello).