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Donald Normal sostiene, en su libro The Invisible Computer que los ordenadores deberían ser silenciosos, invisibles y discretos para que la herramienta sea parte de la tarea de tal forma que usarla resulte sumamente obvio y no sea necesario tocar un solo manual de uso para entenderlo.

The Hidden Radio, diseñado por John Van Der Nieuwenhuizen, es el mismo concepto pero llevado a un extremo que probablemente es muy inteligente pero al mismo tiempo bastante tonto. El radio no tiene controles obvios, porque el aparato es en si mismo todos los controles necesarios para operarlo.

Para prenderlo se sube la "tapa" (mientras más arriba, más alto el volumen) y se cambia de estación girándola. Extremadamente sencillo, simple, minimalista. El único problema que encuentro es que aparentemente no hay una forma de guardar estaciones favoritas y no hay un lugar donde muestre qué estación estás escuchando.

Aún así, debería ser un ejemplo para diseñadores industriales que de verdad, menos es más.

Enlace: The Hidden Radio | Vía: Kottke

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