Nunca lo entenderé. No sabré si los diseñadores quieren demostrar que pueden construir cualquier cosa de la nada, denotando una gran creatividad; o si en cambio, deberían crear cosas útiles. Porque yo no creo que nadie vaya a rebanarse el cuerpo sentándose en esta silla. ¿Que está hecha de CDs? Vale, ¿y eso qué importa? Y tal y como dice Inti en Esquizopedia, con el canon la cosa se puede ir de precio.
La obra es de Belén Hermosa y se mostró en una feria de mobiliario de Valencia. Me recuerda aquel otro concepto noventero y nada útil del reproductor de CDs rebanador.