Un orangután de cuatro años llamado Bernas está aprendiendo a jugar videojuegos; días atrás uso sus labios y patas para jugar con la pantalla táctil. Madu su madre es aún mejor en esto, los dos están "enganchados" a los juegos de video mientras investigadores estudian las habilidades cognitivas de estos primates.
Los datos ayudarán a los científicos a entender mejor sus formas de socialización. La idea final es que los orangutanes enseñar a los orangutanes a encontrar maneras más fáciles y sencillas de encontrar comida y de esa forma crear emejores strategias de conservación de la especie.