Resulta muy curioso que la revista de tecnología no tuviera control sobre lo que alguna vez fue su sitio, Wired.com. En 1998 fueron separados cuando Condé Nast Publications compró Wired y Lycos compró el sitio. Por medio de un acuerdo comercial, Wired.com tenía permiso de re-publicar el contenido de la revista, pero esta no tenía ningún control editorial o creativo sobre el sitio.
Después de ocho años se reúnen de nuevo, Condé Nast compra Wired.com por 25 millones de dólares, un valor mucho más conservador que los 83 millones de dólares que alguna vez pagó Lycos. Esta transacción le da el poder de las noticias, el sitio y el dominio a Condé Nast, pero Lycos se quedará con nombres/propiedades como HotBot, Hotwired y Webmonkey.
Chris Anderson, actual editor de Wired (la revista) evidentemente está feliz y emocionado. Según un post en su blog, combinando la parte offline con la parte online de la revista se pueden convertir en unos verdaderos líderes en la innovación de medios digitales. Realmente me gustaría que suceda pues hacen falta ideas.