François Derbaix es uno de los inversores y emprendedores del momento, sobre todo para aquellos que estás estrechamente relacionado con el negocio del fintech donde, según él, se encuentra mucho más cómodo. Con una clara tendencia a cambiar el mundo a través de startups disruptivas no duda en confesar que le encanta enfrentarse a los grandes bancos y, que otro tipo de sectores se tengan que cambiar su acomodada situación a causa de las nuevas tendencias. Inversor metódico, al estilo de Cabiedes, no soporta a los emprendedores quejicas. Para empezar, ¿quién es François Derbaix?
Suelen creer que soy de Sevilla (ríe con un marcado acento francófono), pero soy Belga. Me suelen preguntar de qué parte de Francia soy porque soy francófono, pero estoy en España desde el año 2000 importado por mi mujer española. Antes de venir estuve dos años de consultor en The Boston Consulting Group, pero nada más llegar a España monté Toprural. Desde el inicio, mi mujer Marta encontró un trabajo por cuenta ajena para tener un sueldo fijo mientras me ayudaba con la empresa. En dos años la empresa creció muchísimo y ella dejó su trabajo y se puso a montar Rentalia, justo cuando Toprural podía mantenernos. Nos echábamos una mano mutuamente en nuestras empresas.
Emprendimos a destiempo, sobre todo porque emprender los dos a la vez hubiese sido muy complicado, ya además no nos gusta meternos en los negocios del otro. Vendimos Toprural a HomeAway y Rentalia a Idealista, y justo después ella se puso a montar SoySuper y yo no volví a emprender hasta un tiempo después. Me centré en mi papel como business angelas. Durante este tiempo invertí en startups fintech sobre todo: Kantox, Comunitae, Novicap...
En 2014 volví a recaer como emprendedor con Bewa7er, un mercado secundario para empresas no cotizadas. Pero lo tuvimos que pausar por temas regulatorios; se nos pidió enfocarlo de forma distinta y ello nos está llevando tiempo, pero ya tenemos una solución y esperamos lanzarlo este año de nuevo. Mientras, le dimos prioridad a otro proyecto llamado Indexa, y ahí sí que empezamos con un negocio plenamente regulado. Somos el primer gestor automatizado de carteras en España, un modelo muy contrastado en EE.UU, Inglaterra, Alemania... Calculamos que somos un 80% más baratos que un banco o los fondos de inversión tradicionales. La cuestión es que ellos te ofrecen lo que más les interesa a ellos y no al cliente. A nosotros nos pagas una comisión, pero elegimos lo mejor para ti. No mejoramos la rentabilidad siendo más listos o batiendo al mercado, que es lo que venden los bancos, nosotros buscamos mejorar la rentabilidad a base de una mayor diversificación y menores costes.
Y también participo como co-fundador en Aplazame, otra startup fintech para financiar compras de e-commerce. He invertido en total en más de 25 proyectos pero ahora estoy frenando el ritmo.
"Cuando te implicas demasiado en buscar financiación es muy mala señal para los inversores"
¿Para ti es mejor invertir o emprender?
He hecho las dos cosas y me gustan ambas, pero prefiero emprender sin duda. Creo que es una aventura más interesante, aunque con mucho más riesgo porque centras tu esfuerzo en un solo proyecto. Pero es muy interesante. Y me encanta invertir porque me gusta echar una mano, y aprender de todos los temas que se me presentan en cada startup distinta que veo.
Y además, soy diferente en cada papel. Como emprendedor soy mucho más trabajador que de inversor. Como emprendedor estoy hasta los fines de semana. El puesto de inversor es mucho más cómodo porque solo tiene una reunión de vez en cuando, y poca cosa más. Estoy encima de las startups en las que invierto en la medida en que me invitan. Estoy disponible para cuando quieran, pero no quiero estar encima de ellos, ni voy a pedir un reporte específico que no les retrase en el negocio... Encantado de hablar, dar contactos, ideas, recomendaciones... pero son libres de hacer lo que quieran. Para mi hay un solo piloto, que es el emprendedor, y ellos tienen la última palabra. Si dicen blanco, y a mi me parece negro pero terminan eligiendo blanco es cosa suya. Ellos saben más que yo de su negocio.
"Cuanto menos hagan los políticos por los emprendedores y las startups mucho mejor para todos"
Has comentado que hubo problemas con Bewa7er, ¿qué paso con ese tema?
En Estados Unidos hay varias webs que funcionan muy bien, como SecondMarket que lo ha sido adquirida por el Nasdaq, o SharesPost o Equitizen que son otras referencias. Allí hay un mercado secundario organizado de mucho volumen, en Europa no. Había dos, Bewa7er era uno y en Reino Unido había otro, pero ambos hemos tenido que parar. Espero relanzarlo en breve, aunque en otro formato seguro para el inversor.
Ha sido una cuestión de regulación, porque demanda hay por parte de inversores y empresas. De hecho, hicimos una operación al poco de salir. Al final hemos tenido que encajarlo en la regulación actual de alguna manera.
Al final, es necesario tener un mercado secundario porque tú sabes cuando inviertes en una startup, pero tu inversión se puede quedar atrapada para siempre. Y los exits en España tardan de media diez años, son muchos años, y esto teniendo en cuenta que la cosa vaya bien. Es necesario que los business angels puedan optar al mercado secundario para que otros inversores más conservadores puedan invertir, dejando al sector con más dinero para circular. Si no hay mercado secundario se reduce el primario. Es importante dar liquidez ahora mismo.
También creaste Toprural, que fue un éxito, ¿qué supuso esto para ti?
Fue una experiencia fantástica. Cuando lo vendimos estaba facturando cuatro millones y medio, estaba en diez países... Fueron doce años de dedicación absoluta, de mucho trabajo. Por otra parte, tampoco quería estar trabajando tantos años en lo mismo. A posteriori preferiría haber vendido antes. Me gusta más el emprendimiento de los primeros años que de los posteriores, prefiero gestionar un equipo pequeño que un equipo grande.
Pero hay muy poca gente que vende su empresa y hay muy pocas ventas en España. Para que haya una venta de una startup hay 100 proyectos que no se venden, y muchas se acaban muriendo.
**Comparado con otros países que conoces, ¿en qué situación está España?
Bélgica, donde he invertido en alguna startup, es un mercado muy pequeño enfocado al extranjero. En otros países, como Inglaterra, Alemania o Francia, hay startups bastante más grandes, pero porque son mercados mucho más grandes. Pero veo a España como un mercado bastante grande, mucho más homogéneo pese a los idiomas y las regiones diferentes. Aunque soy belga prefiero invertir en España porque conozco mejor el entorno y la red. Si me llegan inversiones de otros países ni las miro, porque por estadística es que si me ha llegado a mi es que los más cercanos ni las han considerado. Si una inversión es buena la van a detectar.
Tanto como emprendedor como inversor me importa mucho la estadística, sobre todo ahora que tengo más experiencia, y procuro no ir en contra de ella. Alguien que es muy céntrico, como Cabiedes, tiene más éxito que si saliese a invertir fuera de España. Hay que ser muy fuerte a nivel local como inversor. Como emprendedor vale la pena probar la expansión internacional.
¿Cómo eliges tus inversiones?**
Cuando solo invertía hace unos años tenía un método. Intentaba mirar todo bajo mis criterios; ahora que no tengo tiempo he metido un criterio más encima del resto, y es que solo miro empresas de fintech. Es el sector que más conozco, el que más me apetece y porque creo que es el que tiene más oportunidades. Además, me encanta poder competir con los grandes bancos. Básicamente lo que no es fintech en este momento ni lo miro.
Si por el contrario son emprendedores fintech y vienen a verme, voy a hablar con mucho interés porque hay muy pocos ahora mismo, y en pocos minutos me podré enterar cuál es su objetivo y si me pueden encajar en mi estrategia de inversión.
"Muchos creen que tener éxito es hacer una ronda grande"
Antes del fintech tenía como criterio que ya tuviesen clientes, un negocio lanzado, 20% de crecimiento mensual... Me baso en las métricas, que el mercado me confirme que hay demanda, pero algunas veces me salto la regla. Mi inversión del año pasado fue en Besepa, cuando solo facturaban 100 euros al mes.
**Seguramente has visto muchas startups buscando inversión, ¿no crees que hay demasiada búsqueda de fondos en vez de resultados?
Creo que hay una enorme distorsión apoyada por todos. Muchos creen que tener éxito es hacer una ronda grande, porque cuando una empresa llega al millón de facturación no sale en los medios, pero cuando hace una ronda de ese tamaño sí. Es un mensaje que se está machacando demasiado. Se da visibilidad al que consigue financiación, pero no al que se muere, por lo que muchos creen que el camino normal es hacer rondas. Creo que es mejor buscar muy poco dinero y muy tarde que demasiado pronto y demasiado dinero.
Al final, muchos emprendedores acaban dedicando más tiempo a tener una valoración muy alta y a cerrar rondas de inversión que a atender a sus clientes. Pero cuando un emprendedor dedica demasiado tiempo a esa búsqueda de financiación es una mala señal para los inversores.
¿Qué materia prima tiene el emprendedor?
Creo que no hay reglas. Lo que sí veo es a gente que trabaja mucho, que cuidan mucho la ejecución, gente obsesionada... Un perfil obsesivo en resumen. Por lo demás, hay gente tan distinta dependiendo del negocio... Es bueno tener educación universitaria, pero no imprescindible. Es bueno haber trabajado en una empresa grande para saber cómo funcionan, pero tampoco es imprescindible. Y es bueno tener ahorros propios para empezar el negocio, pero no imprescindible.
Hay un aspecto importante de querer cambiar las cosas, encontrar una oportunidad y querer ser parte del cambio. El buen emprendedor en mi opinión es alguien que no se queja, si no que se adapta. No le sirve quejarse de los inversores, del gobierno, del no sé qué: lo que tiene que hacer es adaptarse a las condiciones del mercado y ofrecer lo mejor para sus clientes
¿Y alguna para el inversor?**
El inversor debe tener la cabeza fría. Tener un método, ser sistemático y no dejarse llevar por el momento del entusiasmo. La metodología te permite ver dónde te has equivocado y donde tienes que mejorar, te permite aprender. Hay parte de intuición y suerte, pero hay que procurar que sea lo mínimo.
**Nos encontramos en un momento de cambio político, ¿cómo afecta esto a los emprendedores?
Yo vengo del país que tiene el récord de mayor tiempo sin gobierno, más de un año, y la prima de riesgo bajaba. Es decir, cuanto más tiempo Bélgica estaba sin gobierno mejor iba. Yo, sinceramente, creo que hay mucha intoxicación por la información porque se tira mucho más por las noticias negativas. El mundo va mucho mejor de lo que pintan las noticias. Y yo intento no dejarme intoxicar. En España, cuanto menos hagan los políticos por los emprendedores mejor. Ya han hecho algo, pero mejor que no se metan.
Incluso la política ha tocado el tema de Uber, Cabify... ¿Qué opinas de ellos?
Si hubiera conocido a Uber en fase inicial me habría encantado invertir, en Airbnb o BlaBlaCar. En general me parecen empresas muy interesantes que están ayudando mucho a mucha gente, a muchos profesionales a compartir sus costes o lo que sea.
Me parece surrealista que tenga que haber un control de licencias. Es un monopolio legal, el Estado ha regularizado algo que no debería estarlo. Que un sector como el taxi esté tan regulado me parece una aberración, y me encanta que haya gente que quiera disrumpirlo.
Yo soy pro libertad en todos los sectores.
Te centras en el sector fintech, ¿pero no crees que al final estará muy saturado?
Eso pasará en algún momento. Como pasó con los clasificados como Toprural; en su momento había una oportunidad, pero ahora es un sector saturado. Los puestos disponibles se van ocupando y quién sabe cómo estaremos en diez años.
Los bancos se debaten entre desarrollar ellos o comprar. Pero en muchos casos es que los grandes no saben reaccionar a tiempo y desaparecen, como ha pasado con las agencias de viajes tradicionales. Los no nativos de Internet no saben adaptarse. En banca yo creo que va a pasar lo mismo, los bancos están repercutiendo costes muy altos al cliente y el cliente está cambiando de gustos. Y todo lo que está captando el fintech lo está perdiendo la banca. Y varios informes apuntan a que las startups se van a quedar con una gran proporción de mercado.
¿Qué personas destacarías de tus compañeros del sector?**
Hay gente con la que he aprendido mucho. De los Cabiedes, Unai Ansejo y Ramón Blanco que están en Indexa desde el principio. Fernando Cabello en Aplazame. Con Jesús Encinar de Idealista, que le conocía desde antes pero luego invirtió en Toprural. Marek Fodor me parece excepcional con su "secuencia del éxito" basada en usuarios-clientes-inversores, en este orden y no en otro orden. Mi mujer Marta, María y Eva de Tiendeo, Pepita de We Are Knitters... Pero hay muy pocas inversoras y emprendedoras.
Es un sector con gente muy interesante y en el que quiero seguir activo. Es un sector muy bueno para mantener la cabeza activa.