Si queremos pensar en un smartphone en Android cuya experiencia de usuario sea exquisita sin importar las especificaciones, todos pensamos en el Motorola Moto G. El popular smartphone de Motorola llegó en noviembre de 2013 con un precio espectacular para lo que ofrecía en realidad: una experiencia de usuario fluida y muy cercana a Android stock. Un año ha pasado y el Moto G iba necesitando ya una renovación, por lo que que cuando vimos la invitación de Motorola para el día 4 de septiembre junto con un símbolo de smartphone con una letra "G" en el centro, sabíamos qué se avecinaba, y hoy finalmente se ha hecho oficial el nuevo Moto G con las siguientes características:
- Pantalla: panel IPS de 5 pulgadas
- Resolución: HD a 1280 x 720 píxeles
- Procesador: Snapdragon 400 quad-core a 1.2 GHz
- Memoria RAM: 1 GB de RAM
- Almacenamiento: 8 / 16 GB + ranura para microSD
- Cámara: 8 megapixeles con flash LED
- Cámara delantera: 2 megapíxeles
- Software: Android 4.4.4
- Conectividad: 3G, HSPA+, Bluetooth 4.0 LE, A-GPS, GLONASS
- Medidas: 141.5 x 70.7 x 11 mm
- Peso: 149 g
Tanto con el nuevo Moto X y el nuevo Moto G Motorola ha decidido ir a lo seguro y pulir algunos defectos que vimos en los anteriores modelos de la compañía estadounidense. Bajo mi opinión, estos cambios quizás puedan parecer insuficientes a muchos usuarios, ya que no ha habido una mejora dramática en el hardware como podemos ver entre modelos de otras compañías, como Samsung o HTC. Sin embargo, también hemos de tener en cuenta de que el hardware es secundario para Motorola, ya que son capaces de ofrecer una buena experiencia de usuario sin utilizar el último hardware disponible en el mercado.
O dejar el tamaño de pantalla igual o mejorar la resolución. Esto no, Motorola.
En el caso del nuevo Moto G, este cambio puede ser agradecido por algunos de los usuarios, ya que han conseguido contener el precio y mantener en los mismo niveles que vimos con el primer Moto G, y no precios de hasta 250 dólares que pudimos ver en filtraciones previas. Con una pantalla que aumenta de 4.5 a 5 pulgadas y una resolución HD a 720p, dicha resolución se queda un poco un corta y se echa de menos una resolución Full HD, aunque como hemos dicho previamente, esto podría haber hecho que su precio se incrementara, ya que la pantalla es un componente caro y el nuevo Moto G sigue contando con una de las mejores resoluciones para su gama, superior a dispositivos como el Lumia 630.
Un poco más incomprensible es el caso del hardware que potencia al nuevo gama media de Motorola, ya que con un procesador Snapdragon 400 quad-core y 1 GB de RAM (mismas características que en el Moto G original) estamos seguros que veremos una buen fluidez en el sistema operativo y la interfaz en general, más aún con una resolución de tan "sólo" 1280 x 720 píxeles, pero esperábamos al menos un aumento en la memoria RAM, no ya hasta los 2 GB de RAM, pero al menos alcanzar un punto intermedio como los 1.5 GB de RAM que encontramos en el Galaxy S5 mini.
En cambio, si vemos una mejora sustancial en el apartado fotográfico del nuevo Moto G, que utilizará una cámara trasera de 8 megapíxeles con flash LED, lo cual supone una mejora sustancial de la lente de 5 megapíxeles que vimos en el Moto G original y que era insuficiente para la gran mayoría de usuarios. También habrá mejoras en el apartado de la cámara frontal, que llegará a los 2 megapíxeles, y supondrá una mejora sustancial para videollamadas o selfies (si la utilizas para eso). Todo esto aumento de pantalla y dimensiones también penaliza el peso final del Moto G, aunque ligeramente, pasando de 143 g a 149 g, un aumento que pasará desapercibido para muchos.
El software sin adulterar de Motorola es la mejor opción para mantener una buena experiencia de usuario.
Pasando al apartado de memoria, vemos que Motorola seguirá manteniendo la opción de 8 o 16 GB según el modelo que queramos comprar, aunque ha escuchado las críticas de los usuarios y en esta ocasión dispondremos de una ranura para microSD con la que podremos aumentar nuestra memoria interna hasta 32 GB extra. Y como siempre, el nuevo Moto G llegará con la última versión de Android disponible, Android 4.4.4, con una interfaz casi idéntica al Android que podemos encontrar en los Nexus, todo ello para garantizar las últimas actualizaciones lo más rápidamente posible y, de hecho, Motorola promete que el nuevo Moto G será actualizado a Android L.
Anteriormente decíamos que con el nuevo Moto G Motorola había optado por ser más conservadora a la hora de mejorar el hardware con el fin de conservar el precio atractivo que consiguió en el Moto G original, y es que el nuevo Moto G está disponible desde el 5 de septiembre a un precio de 179€ libre para el modelo básico, lo cual considero todo un acierto. A ese precio, con una mejor cámara y con la opción de utilizar microSD se convierte en una opción aún más interesante que su predecesor, que en su día se convirtió en el terminal más vendido en la historia de Motorola y está claro que Motorola pretende repetir esa fórmula ganadora.