Hace unos días publicamos los primeros resultados del 4G de Vodafone obtenidos con un LG Optimus G. Sí, la descarga es rapidísima y la subida roza lo excepcional, al menos para las conexiones a las que estamos acostumbrados en España. Pero en el estado actual del 4G, totalmente embrionario, hay muchos factores que tienen que ver con la velocidad del 4G de Vodafone que logremos alcanzar.
El principal, la distancia al nodo más próximo. Pero el propio terminal empleado para las pruebas o la saturación de la red en ese momento también tienen afectan a los resultados obtenidos. Del LG que empleamos puede haber diferencias si pasamos a un Galaxy S4, otro de los smartphones de Vodafone compatibles con 4G. Por ello, hemos hecho nuevas pruebas, especialmente teniendo en cuenta que la velocidad del 4G de Vodafone que alcanzamos durante las pruebas estaban bastante por debajo de lo esperado.
Zonas de Madrid
Sobre la cobertura de la capital española ya hablamos en el artículo sobre las primeras pruebas. Se centra en Madrid capital, y apenas se extiende a otros municipios. Eso sí, Vodafone califica a casi toda la ciudad con una cobertura 'Muy buena', viéndose reducida en los límites que marcan San Blas, Ciudad Universitaria, Vallecas, La Latina y Carabanchel. La realidad es que la velocidad varía muchísimo incluso en pequeños radios de una misma zona.
Callao: en una de las pruebas obtuvo el mayor resultado, 78 Mbps de bajada y 45 Mbps de subida. Luego en los aledaños o en diferentes puntos de la propia plaza, los resultados fueron algo peores, antes de partir hacia Gran Vía.
Sol: justo frente a la tienda de Vodafone más conocida del país, los resultados no son ni mucho menos óptimos. Una pena que en un lugar tan concurrido y célebre como la Puerta del Sol, y teniendo su tienda allí, la velocidad del 4G de Vodafone sea tan inferior a lo esperado. Unos 30 Mbps de descarga y 23-24 Mbps de subida en diferentes pruebas.5
- Tetuán: en el cruce de Bravo Murillo con Lino alcanzamos la mayor velocidad, 23 Mbps de bajada y 19 Mbps de subida. Fue en ese lugar porque en el resto del distrito las velocidades eran aún inferiores, y Vodafone nos indicó esas dos calles como de las mejores en cuanto a cobertura 4G. Como ocurrió en el análisis anterior, resultados algo pobres.
Atocha: justo frente a la estación se alcanzaron velocidades de descarga de hasta 38 Mbps, por 23 Mbps de subida. Respecto a la prueba anterior con el LG Optimus G, la velocidad ha aumentado considerablemente, aunque sería lógico esperar que en una zona a cielo abierto y tan transitada Vodafone hubiese posibilitado velocidades que aprovechasen el potencial del 4G.
Antón Martín: velocidad alcanzada en plena calle Atocha a esta altura, 31 Mbps de descarga y 11 Mbps de subida. En alguna calle de los aledaños, bajaba hasta unos 24-27 Mbps de descarga y 5-10 Mbps de subida.
Retiro: en el interior del parque era esperable que las velocidades alcanzadas no fueran demasiado rápidas, pasó en el análisis anterior y ha vuelto a pasar con el Samsung Galaxy S4. En esta ocasión, 18 Mbps de bajada y 12 Mbps de subida, siendo esta última la cifra que más ha aumentado. También lo probamos en la zona residencial de su salida sur-este, con velocidades mucho mejores: 45 Mbps de descarga, 24 Mbps de subida.
Gran Vía: en la zona final, antes de llegar a Plaza de España, obtuvimos las velocidades más bajas en varios puntos de la vía, 12 Mbps de bajada y 4 Mbps de subida. Frente al edificio de Telefónica, al final de la calle Montera, la velocidad aumentó hasta los 85 Mbps de descarga y 36 Mbps de subida. Queda claro que esta vía es bastante irregular en cuanto a resultados.
Chamartín: cifras similares a Tetuán, velocidades alcanzadas de 23 Mbps de descarga y 22 Mbps de subida aproximadamente. En un momento puntual, cerca de la zona de Cuatro Torres Business Area, se llegó al pico en la zona, con 50 Mbps de descarga y 28 Mbps de subida.
Conclusiones
No hay agravio comparativo, hemos probado de forma idéntica la velocidad del 4G de Vodafone en un LG Optimus G y un Samsung Galaxy S4, y como se suele decir de los terminales de color rojo, 'el Samsung corre más'. Las velocidades en prácticamente todos los casos son superiores respecto al LG, aunque es importante recordar que la velocidad varía en función de muchos factores, y que el 4G de Vodafone sigue en pañales, apenas hace unas semanas que se implantó, y continuará creciendo hasta final de año. Luego, en enero, vendrá la implantación fuerte, con la liberalización de la banda de 800 MHz. Pero eso lo reservamos para un punto de la siguiente lista:
La cobertura en interiores es nula. Con las bandas que usa ahora Vodafone para su red 4G (1800 y 2600 MHz) es normal, ambas no tienen buena respuesta en interiores, no penetran en los edificios. Cuando se libere la banda de 800 MHz, podrá usarse el 4G dentro de los edificios. Hasta entonces, esta cobertura queda limitada a zonas a cielo abierto.
La velocidad varía mucho, demasiado. Desde la distancia al nodo, a la zona en la que nos encontremos. Es imposible mantener una velocidad constante todavía, y pasará un tiempo hasta que sea posible. De los 85 Mbps de descarga en Gran Vía con Montera, a caminar hacia Plaza España y empeorar la velocidad hasta disminuir a un 20 %, apenas hay unos pocos minutos a pie.
El terminal sí importa. Ya se sabía que había algunos terminales como el Huawei Ascend P2 que podían alcanzar velocidades que otros no. Pero no pensábamos que entre terminales como el Optimus G y el Galaxy S4 habrían diferencias notables (aunque no exageradas).
No tenemos ni idea de lo que nos espera. 85 Mbps de descarga y 36 Mbps de subida (y ni mucho menos es el tope) abren la puerta a servicios que ahora no podemos imaginar. Se ha hablado de las posibilidades del LTE para el vídeo Full HD en streaming, pero vendrán servicios que no esperamos. De la misma forma que con los primeros pasos del 3G no esperábamos acabar enganchados a un smartphone pasando el día descargando y subiendo fotos o microvídeos, o con servicios de música en streaming en nuestro bolsillo, estas velocidades abrirán nuevas posibilidades dentro de unos años. Abróchense los cinturones.