Hoy Nokia liberó los resultados financieros del tercer trimestre de 2012 y si bien las pérdidas siguen por encima de los beneficios, el bajón ha sido ligero en comparación a las finanzas anteriores. En vista de que no hay un crecimiento puntual que nos diga a todos que Nokia realmente se está recuperando, Elop, CEO de Nokia, estuvo realizando declaraciones y en una de ellas reveló que una de las estrategias para poder aumentar las ventas, que Windows Phone sea popular y, además, esté a poyado por diferentes fabricantes.
Lo curioso de todo es que Elop no sólo menciona HTC y Samsung, también integra a Microsoft como uno de los mejores movimientos para que se estimule la adopción de Windows Phone. Obviamente esto no quiere decir que Microsoft acatará y lanzarán su teléfono (si lo tienen pensado) mucho antes, simplemente es una acotación que no debemos pasar por alto porque da para analizar un par de aspectos.
Por un lado el contrato de Nokia con Microsoft parece que no muestra más ventajas sobre otros fabricantes, más allá de las aplicaciones exclusivas y alianzas para el uso de sus servicios en Windows Phone y esto no ha sido suficiente para que "despeguen" como se viene creyendo. Claramente aún no hay terminales con Windows Phone 8 en el mercado porque estarán disponibles a partir del 29 de este mes, sin embargo, hasta ahora Nokia ha estado prácticamente sola y no ha podido, a pesar de la ayuda de Microsoft, dar a conocer Windows Phone y aumentar sus ventas.
Siempre creí que si Nokia lograba captar la atención con los primeros equipos y causar gran expectativa con los nuevos, no sería necesario a corto plazo, como lo vengo comentando, que Microsoft lanzase un terminal propio. Por lo visto, la tarea les quedó grande.
Empuje, no competencia
Nokia tiene cierta culpa por haber descuidado el mercado de teléfonos inteligentes, sin embargo, en la aventura con Windows Phone ha estado prácticamente sola. A pesar de que HTC el Windows Phone 8X y 8S, aún es necesario el empuje de algunos fabricantes como lo hace Samsung en Android, que si bien fue el primero que anunció su equipo con WindowS Phone 8, no parece tener planes de nuevos terminales.
En cuanto a Microsoft, que no nos quede duda de que lanzarán un terminal en algún momento, sólo que no está claro cuándo. Para Nokia esto sería un beneficio porque se daría a conocer la plataforma con nuevo interés y ya que tienen una amplia variedad de terminales, no les afectaría en disminución de ventas, sería todo lo contrario. Con Surface, Microsoft tuvo que tomar las riendas y mostrar a sus socios cómo se hacen las cosas, si esto paso con Windows Phone 8 podría ser el empuje que necesita el sistema operativo y, por supuesto, los fabricantes que apoyan el proyecto.
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