La guerra termonuclear entre Apple y Samsung ha desvelado muchos detalles interesantes: por ejemplo que la propia Google advirtiera a Samsung que la tablet Galaxy Tab tenía un diseño demasiado parecido al iPad; una declaración curiosa por parte de Google, en la que decía que algunas patentes de Apple son tan buenas que deberían compartirlas con todo el mundo (el algoritmo de búsqueda de Google también es realmente bueno, y no lo comparten); o algunos prototipos del iPhone y el iPad que finalmente no llegaron ningún lado. Pero los dos siguientes apartados explican la última defensa de Samsung en este caso.
Guerra de prototipos
El nuevo frente de batalla son los prototipos, pero hagamos un pequeño análisis, ¿por qué los prototipos?, la guerra es por productos finales al fin y al cabo. La respuesta puede ser que Samsung no tiene argumentos sólidos para defenderse.Uno de los frentes de batalla de la empresa coreana fue que el iPhone 4 se inspiraba en Sony-ericcson, concretamente en un prototipo conocido como JONY.
Repasemos, Samsung es demandada por copiar a Apple, y su defensa es que Apple también copió a Sony-ericsson. Siendo objetivos, este argumento es un poco infantil, pero aun así ha tenido respuesta por parte de Apple. El prototipo que veis en la imagen superior, conocido como Purple y que data de 2005 es la prueba que han presentado los de Cupertino para demostrar que el diseño del iPhone 4 ya viene de unos cuantos años atrás y no está inspirado en Sony-ericsson.
Personalmente, le veo poco sentido a entablar una lucha de prototipos, al fin y al cabo, para elaborar un diseño se usan decenas de prototipos diferentes que luego quedan en nada, pero parece que Samsung no tiene algo más solido para defenderse, y además no recurre a prototipos propios, si no de otras empresas.
Diseños anteriores de Samsung
El otro frente de defensa de Samsung en el apartado hardware, es que ellos ya tenían diseños finales con un aspecto similar al iPhone, pero fueron lanzados antes que el propio iPhone. O lo que es lo mismo, que el iPhone es una copia de los diseños de la imagen superior. Si observamos la imagen, la verdad es que ninguno de los iPhone que hay actualmente en el mercado se parecen mucho a esos teléfonos, comparten el color negro y una pantalla que cubre la mayoría del dispositivo, aunque de diferente proporción, pero poco más.
En este caso, no recurren a otra empresa para defenderse, lo que lo convierte en un argumento más fuerte, pero aun así, esos diseños no guardan mucho parecido con el iPhone, no más parecido del que guardan con un Sony Xperia por ejemplo.
Como conclusión final, mi impresión al respecto de todo esto es que no ha sido una circunstancia que se diera por casualidad, no es una demanda aislada. Incluso antes de la primera demanda, Google y Apple ya avisaron a Samsung sobre inspirarse demasiado en sus productos, algo a lo que hicieron caso omiso. En un momento puntual, dos diseños de empresas tecnológicas se pueden parecer de forma fortuita, pero esto no es lo que ha ocurrido con Samsung, solo hay que dar un repaso por la inspiración de Samsung en Apple.
La defensa de los coreanos no está dando pistas de ser muy sólida, aunque influyen muchos factores para que los jueces den la razón a unos y a otros. Pero detrás de todo esto se puede ver una falta de inspiración en el diseño por parte de los coreanos, algo que afortunadamente está mejorando con el reciente Galaxy SIII, que al margen de estar inspirado en el iPhone, propone unas líneas de diseño diferentes, y que es la única ventaja que puede aportar todo esto a nosotros, productos diferentes y más innovación.