Mi MacBook Pro ya no es lo que era, al menos esa es la sensación que he tenido últimamente. Compré mi equipo en el año 2008, es un modelo early-2008 con un procesador Intel Core 2 Duo de 2,4 GHz y con una actualización de 4 GB de memoria RAM. Desde que instalé el sistema operativo Lion, he comenzado a replantearme si fue una buena decisión. Quiero decir, amo la más reciente versión de OS X: es una explosión visual, con características poderosísimas como Spaces y Mission Control, pero siento que mi equipo se ha quedado atrás en esta carrera. Al igual que muchos usuarios, he comenzado a experimentar una suerte de ralentizado y a veces lag a la hora de realizar determinadas acciones o abrir aplicaciones. Mi búsqueda de respuestas me ha llevado a confeccionar la siguiente publicación, un compilado de causas y soluciones para equipos Mac -lentos- bajo Lion.

Instalar de Cero La primera gran recomendación para aquellos que estén por actualizar a la más reciente versión de OS X, o quienes estén considerando formatear y empezar de nuevo, es llevar a cabo una instalación limpia. Con esto quiero decir que cuando estén atravesando la instalación Lion deben elegir una instalación de cero, eliminando por completo toda la información y registros existentes en vez de instalar sobre lo existente. De más está aclarar que si hacen esto, deben tener la precaución de realizar copias de respaldo de todos sus documentos y, por qué no, asegurarse de tener (o descargar luego) los instaladores de sus aplicaciones favoritas.

Spotlight La primera vez que se inicia alguno de los modernos sistemas operativos de Apple, como Leopard, Snow Leopard, o Lion, notarán que su funcionamiento es excesivamente lento. La razón principal es Spotlight, la herramienta mejor conocida por aparecer como una pequeña lupa en la parte superior derecha de la pantalla, en el menú superior de OS X. Lo que Spotlight hace la primera vez (y cada tanto) es indexar todas las carpetas y archivos presentes en el equipo. Como habrán de imaginar, ésta es una labor pesada, por lo que es normal el excesivo uso del CPU y el ralentizado del equipo por un tiempo considerable. Sabrán si Spotlight está indexando si el ícono de la lupa presenta un punto en su centro, o si al hacerle click a este ven una barra de progreso y su explicación. La única solución a esto es el tiempo: hay que esperar a que esto termine y, por qué no, reiniciar un par de veces y dejar que el sistema de acomode.

Escritorios Limpios Una persona muy conocedora del tema sugirió algo que parece tener influencia en el funcionamiento del equipo. Es recomendable tener los escritorios limpios, con pocos archivos y carpetas (especialmente si son documentos grandes o pesados). Su explicación fue que, como sucede con Spotlight y la indexación, el sistema operativo de Mac está constantemente revisando y actualizando el escritorio, por lo que si hay muchísimas carpetas, subcarpetas, y documentos, esto le demandará más. No sé si la teoría es cierta pero la práctica me lo ha demostrado. Tal vez sólo sea un placebo pero, vamos, en el peor de los casos tendrán un ordenador más presentable.

RAM Si bien el requerimiento mínimo de memoria RAM en Lion es de 2 GB, se recomienda no confiar en ello. Básicamente, esto quiere decir que podrán instalar Lion en un equipo con 2GB de RAM pero esto no es sinónimo de un rápido y fluido funcionamiento. En mi experiencia personal, 4GB de RAM es algo razonable pero aún no logra satisfacerme. Recomiendo fervientemente que lleven ésta al máximo que soporte sus equipos de escritorio o portátiles.

Reparación de Permisos Si bien es hay opiniones compartidas, muchos consideran que una solución ante un equipo lento y antes respuestas tardías por parte de las aplicaciones es la reparación de permisos. Básicamente, para hacerlo hay que acceder a la Utilidad de Discos en Aplicaciones/Utilidades (o buscándolo en Spotlight), seleccionar el disco principal, y elegir la opción de Reparar los Permisos del Disco.

Aplicaciones en 32 bit Una última recomendación y, por qué no, truco es abrir las aplicaciones más "pesadas" en modo 32 bit. Es decir, en mi caso he configurado para que, por ejemplo, Photoshop abra de esto modo. Para hacerlo, simplemente basta con hacer click derecho sobre el ícono de la aplicación, elegir la opción de Obtener Información, y seleccionar "Abrir el modo 32 bit" en la ventana emergente.

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