Poco a poco la mayor parte de los móviles Android están actualizadose a 2.1, casi el 90% del total. No es ni mucho menos el fin de la fragmentación, pero si un alivio para muchos desarrolladores que se las tienen que ingeniar para que sus aplicaciones funcionen en la mayor parte de los terminales sin prescindir de las mejoras que te aportan versiones más avanzadas.
El 90% de terminales que rebasa la barrera de Android 2.1. Este número es la suma de todos los terminales que ya disponen de Gingerbread (Android 2.3) con un 0,8%, Froyo (Android 2.2) con 57,6% y Eclair (Android 2.1) con un 31,4%.
Este porcentaje viene influido por el aumento en ventas de terminales nuevos y, en menor, por las actualizaciones realizadas por los fabricantes. Algunas compañías, como ya hemos hablado en varias ocasiones, han optado por la obsolescencia intencionada de sus terminales abandonándoles en las versiones 1.5 o 1.6 o retrasando estas actualizaciones hasta que los usuarios no han tenido más remedio de adquirir un nuevo terminal. A veces de otro fabricante.
Creo que a lo largo de tiempo este distanciamiento será menor. Sobre todo debido a que Google ya dijo que van a frenar el ritmo de actualizaciones, al menos se reservarán paquetes más grandes para cada cambio de versión. Se estima que cada 6 meses se lance una nueva versión del sistema.