Finalmente parece ser que la paciencia que hemos tenido quienes aún vemos esta serie ha pagado sus frutos. El episodio anterior y este han subido bastante el nivel, si comparamos el estreno de temporada con lo que hemos visto en este cuarto capítulo, parece que estamos frente a dos series bastante diferentes. Por primera vez los escritores se han tomado la molestia de desarrollar un poco a sus personajes, por suerte para ellos y para nosotros, lo han hecho en esta ocasión con el que mejor planteando tenían desde un principio: Strand.
Fear The Walking Dead se beneficiaría mucho de utilizar con más frecuencia el recurso del flashback. En una serie donde todo sucede tan lentamente y que al parecer tiene grandes dificultades en moverse hacia delante, quizás la clave esté en moverse hacia atrás. La familia de los Clarks es bastante aburrida, de eso no cabe dudas, pero sigue habiendo mucho que no sabemos de ellos, y aún más interesante son los personajes de quienes se rodean, de los que básicamente no sabemos nada. De la misma forma en la que un flashback hizo lo suyo en el episodio anterior, el vistazo a la vida de Strand antes de que todo se fuese al demonio, ha hecho de este uno de los más interesantes hasta ahora. Hasta me recordó un poco a como hacían las cosas en 'Lost'.
Aprendiendo a sobrevivir
Nick es un personaje que tiende a brillar cuando está solo, pareciera que desde que esta serie comenzó quisieran hacer de él una especie de anti-héroe, o un tipo en camino a la redención que ni se ha dado cuenta de que se está convirtiendo en otra persona. Al igual que Strand, Nick es de los pocos que parecen tener más instinto de supervivencia y adaptarse más rápido a los cambios que ocurren a su alrededor. Es bastante satisfactorio verlo tomar lo que aprendió en el episodio anterior y ponerlo en práctica, en lugar de olvidar por completo una información tan valiosa y nunca más usar semejante recurso. Bañado en sangre y en una misión, Nick llega al destino que Strand le indicó.
Ahí se consigue con un hombre del pasado de Strand, un tipo que en medio del apocalipsis se preocupa por una mancha de sangre en su auto, o sus interiores de cuero, no debo ser la única que piensa que huele a muerto.
Demasiado rápido para contar
De regreso en el bote donde nuestras caricaturas de personajes han sido secuestrados por un evidente trío de idiotas, gracias a que Alycia sentía ganas de jugar con el walkie talkie al inicio de la temporada, un personaje que hasta ahora no había hecho nada que mereciera ni un poco de reconocimiento, ha salido del cascarón de la falsa caridad y le ha plantado una semilla de horror en la mente a la "malhechora" embarazada: ¿cuando fue la última vez que lo sentiste moverse?, si muere podría transformarse... Así es, imagina como tu hijo no nacido se convierte en un monstruo dentro de tu vientre y te come desde adentro, ahora trata de pensar con claridad. El verdadero peligro en el océano, es la gente. En el océano, y en cualquier otro lugar, incluyendo tu mente.
Punto para Madison por el terror psicológico que ha infundido en su captora. Punto para Madison por recoger a Strand en el medio del mar. Punto para Fear The Walking Dead por ofrecernos un buen episodio.
