Todos los fabricantes de automóviles dedican una gran parte de los esfuerzos a reciclar todo lo posible sus coches para que el proceso de construcción sea más sostenible para el medio ambiente. Una mentalidad que comenzó no hace muchos años pero que cada año que pasa se torna más importante porque las marcas quieren usar materiales raros para hacer más ligeros y seguros sus coches.
Ford ha confirmado que recicla unos 9 millones de kilogramos de aluminio cada mes en la fábrica que tiene en Dearborn, Estados Unidos, y que se encarga de crear modelos como el F-150, una camioneta de gran envergadura que requiere una grandísima cantidad de aluminio, y en la factoría de Kansas City, también en Estados Unidos.
Se desperdicia hasta un 40% de una bobina de aluminio al crear un chasis.
Como decía, los fabricantes emplean aluminio en gran parte del chasis lugar de acero, un material mucho más complicado de conseguir, por lo que evitar el desperdicio es fundamental si quieren construir muchos miles de unidades de coches cada mes. El uso del aluminio es importante para reducir el peso de los coches y aumentar su rigidez, pero es más costoso y escaso que el acero.
En proceso de creación de un chasis se suele desperdiciar aproximadamente un 40% de la bobina de aluminio empleada, una cantidad demasiado elevada como no ser reutilizada. Hasta hace pocos años era imposible o demasiado costoso el proceso de reutilización del aluminio porque pierde parte de sus propiedades como la maleabilidad o resistencia, pero con los nuevos sistemas se pueden crear nuevos rollos de aluminio basados en estos desechos de la fábrica y así crear más vehículos con el menor uso de material posible. Cada mes se crean en estas dos factorías unos 30.000 chasis para el Ford F-150 con aluminio de desechos de otras camionetas.
El uso de aluminio para crear coches más ligeros, eficientes y seguros ya es tan importante como reutilizar el material sobrante para la creación de más coches. Es un proceso costoso pero necesario para reducir al máximo posible las emisiones contaminantes a la hora de crear coches, no solo se necesita que consuman poco sino que se consuma poco para fabricarlos.