El Acuerdo de Servicios Aéreos que México y Estados Unidos están por poner en marcha se ha trabajado a lo largo de varios años. En el marco del Diálogo Económico de Alto Nivel (DEAN), acordado por los actuales presidentes de ambos países desde 2013, se incluyó la resolución de cerrar negociaciones de este convenio aéreo.
Dicho convenio ya fue firmado en diciembre de 2015 por los dos países por medio de sus titulares en esta materia: Gerardo Ruiz Esparza, Secretario de Comunicaciones y Transportes y Anthony Foxx titular del Departamento de Transporte de Estados Unidos. De forma general los alcances del Acuerdo se resumen, según el documento del DEAN, así:
La conclusión de la negociación para un nuevo Acuerdo de Servicios Aéreos, el cual introducirá regulaciones más flexibles con lo cual aumentará el tráfico aéreo entre México y los EUA. Este acuerdo histórico beneficiará a un gran número de personas y tendrá efectos directos e indirectos en empresas del sector y las actividades económicas de ambos países. El Acuerdo entrará en vigor una vez que se cumpla con los procedimientos legales establecidos en cada país.
Actualmente, en México el acuerdo se encuentra en el Senado para su ratificación. Lo que supone este acuerdo bilateral es que permitiría que ambos países operen rutas entre sus ciudades sin límite, ya que actualmente, salvo algunos casos, cada ruta se limita a dos aerolíneas de cada país; sin que esto suponga que se trata de una política de cielos abiertos pero sí ampliar las libertades de las operaciones entre las aerolíneas de México y Estados Unidos.
En la página de la Embajada de Estados Unidos en México pueden leerse otros alcances de este Acuerdo de Servicios Aéreos:
Por primera vez, el acuerdo permitirá que las operaciones de carga vayan más allá de cada país (quinta libertad), y que todas las rutas de carga entre México/Estados Unidos y un tercer país no tengan que incluir una parada en Estados Unidos/México (séptima libertad).
La Quinta Libertad que se menciona en el párrafo anterior se refiere a que las aerolíneas podrán transportar pasajeros a ciudades de esos países y allí mismo recoger a otros pasajeros para llevarlos a un tercer país. Esta quinta libertad se propuso en tempranas negociaciones del Acuerdo; México se mostró a favor de conceder esta libertad.
Turbulencias
Desde comienzos de las negociaciones de este convenio aéreo México - Estados Unidos se han sumado muchas voces a opinar y señalar lo que supone este acuerdo más allá de la letra escrita. Y es que la diferencia de la flota aérea entre países es muy amplia: mientras que México cuenta con una flota comercial de apenas 350 aviones, Estados Unidos, por su parte, cuenta con 7,000 aeronaves, según declaró la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores, lo cual supone una desventaja para las aerolíneas mexicanas.
El mercado aéreo entre ambos países se reparte entre seis aerolíneas mexicanas y 16 estadounidenses, y del total Estados Unidos tiene la mayor parte con un 61% manejado por sus líneas aéreas. Algunas voces indican que esto supone una mayor ventaja para los usuarios pues habría una mejor oferta de precios, rutas y horarios.
Por su parte, Aeroméxico y Delta han sido señaladas las más beneficiadas por este acuerdo e, incluso, ha traído grandes estira y afloja entre las aerolíneas mexicanas. Aeroméxico y Delta ampliaron sus relaciones comerciales en años pasados y la aerolínea mexicana espera, con este acuerdo, incrementar sus vuelos con la entrada del acuerdo binacional. Ahora bien, también está en busca de una alianza con Delta, sin embargo esto está a consideración de ambos países por las leyes antimonopolio y la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) que analiza si esta alianza catapulta a las aerolíneas a una competencia desventajosa para las demás.
En este mismo sentido, InterJet se ha mostrado crítica ante las negociaciones de Aeroméxico y hasta provocó que se retiraran de la Cámara Nacional de Aerotransportes (Canaero) en octubre de 2015. Por su parte, Volaris y VivaAerobus descartan que se trate de un acuerdo que las ponga en desventaja y sí les de oportunidad de ampliar sus servicios con ofertas más competitivas.
En México se mueven en promedio 35 millones de pasajeros al año, también se prepara para el crecimiento con el Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México. Así pues, queda pendiente la ratificación del Senado para que entre en vigor el Acuerdo, para esto se espera tener foros de análisis con los interesados y expertos para conocer los pormenores de este convenio binacional.